Las posibilidades de Brasil de exportar hidrógeno verde a Europa

Brasil gozaría de grandes oportunidades para exportar hidrógeno verde a los países europeos que buscan reducir su dependencia del gas natural ruso, dijo a BNamericas el presidente ejecutivo de la compañía local Nexway, Marcel Haratz.

“Hoy, Europa importa grandes volúmenes de GNL de EE.UU., pero si quiere sostenibilidad, necesitará hidrógeno verde”, señaló Haratz.

El ejecutivo indicó que Brasil suele tener el hidrógeno verde más barato del mundo.

“Básicamente, porque tenemos abundante energía renovable y muy buenas características técnicas de generación, con mucho viento y sol”, explicó.

Haratz, que asistió a una serie de eventos de hidrógeno verde y amoníaco celebrados en Ámsterdam, aseveró que ya hay proyectos importantes en Medio Oriente y la zona norte de África, que alcanzan hasta los 120GW de capacidad de electrólisis, enfocados en el suministro europeo futuro.

“El hidrógeno verde es lo que impulsará la transición energética mundial y reemplazará al gas natural ruso en Europa”, predijo.

Además de las industrias de energía y fertilizantes, es probable que el transporte marítimo se convierta en un consumidor relevante de hidrógeno verde en forma de amoníaco verde.

Dado que el hidrógeno en estado gaseoso ocupa un espacio importante y la compresión requiere grandes cantidades de energía, la idea es convertirlo en amoníaco, donde permanece en forma líquida.

“Ya existen fabricantes de motores de amoníaco para barcos”, sostuvo Haratz.

Nexway, parte del grupo Comerc, posee cinco acuerdos de proyectos de hidrógeno verde firmados con puertos brasileños, cuatro en la zona noreste y uno en la sureste.

Los negocios prevén la construcción de proyectos en sociedad con Casa dos Ventos con capacidad de electrólisis de más de 2GW.

Además, tiene un protocolo de intención con el estado de Piauí para implementar un proyecto piloto de 250kW para la generación de hidrógeno y planea iniciar la construcción de una planta de hidrógeno verde de tamaño mediano en los próximos meses en un lugar aún por anunciar.

“Será el primero de su tamaño, a escala industrial, en salir de la mesa de dibujo en Brasil”, afirmó Haratz.

VISIÓN GENERAL

Varios estados brasileños trabajan para convertirse en centros de hidrógeno verde.

En Ceará, el puerto de Pecém firmó un memorando de entendimiento para plantas con empresas como Fortescue Future Industries (FFI), Qair Brasil, Enegix Energy y el consorcio Transhydrogen Alliance.

El puerto de Suape, en Pernambuco, hizo lo propio o está en negociaciones con Neoenergia y Qair Brasil, mientras que en Río de Janeiro, Fortescue Future Industries mantiene conversaciones con Porto do Açu.

En Rio Grande do Sul, White Martins suscribió un acuerdo con el estado para la producción de hidrógeno verde.

Algunos de estos proyectos, como los de FFI, Enegix, Quair Brasil y Transhydrogen Alliance, prevén el suministro de hidrógeno verde y/o amoníaco al mercado internacional, principalmente a Europa.