México cede a presiones de EE.UU. por acero y crecen riesgos para exportaciones

México cedió a las presiones que han resurgido en Estados Unidos desde fines del año pasado por la posible triangulación con China de las exportaciones de acero y aluminio.

El Gobierno mexicano acordó con la administración de Joe Biden la imposición de aranceles al acero y al aluminio despachados desde México, pero producidos en parte en otros países, lo que pondría en riesgo las exportaciones.

Lael Brainard, directora del Consejo Económico Nacional de la Casa Blanca, dijo a los reporteros que los aranceles anunciados el miércoles, y que entraron en vigor de inmediato, se aplicarán como parte de un acuerdo con México a través de la sección 232 de la ley de expansión comercial, que se aplica a las importaciones que podrían amenazar la seguridad nacional de EE.UU.

México, el principal socio comercial de EE.UU., estuvo entre los países que en 2019 finalmente obtuvieron una exención de las tarifas bajo la sección 232. Ahora, el país solo está exento bajo ciertas limitaciones.

En adelante, habrá un arancel del 25% sobre el acero no fundido ni vertido en México o Canadá. Por su parte, al aluminio importado desde México que contenga metal fundido o modelado en China, Bielorrusia, Irán o Rusia, tendrá un arancel del 10%.

Aunque el presidente Andrés Manuel López Obrador ―quien firma en el comunicado conjunto de la Casa Blanca― justificó las medidas en su conferencia de prensa diaria el jueves, y aseguró que su Gobierno impuso algunas condiciones, expertos en comercio exterior advierten que tales conllevan riesgos potenciales a las exportaciones de estos metales estratégicos y pueden, a la larga, aumentar las restricciones al comercio. 

AMLO explicó que se logró, por ejemplo, un trato especial para la importación desde México que contenga acero, aluminio o con componentes provenientes de Brasil, con quien dijo tener “muy buena relación”.

La Secretaría de Economía no se ha pronunciado oficialmente sobre las medidas y una portavoz de la cartera sugirió remitirse a las declaraciones ofrecidas por el mandatario, al ser consultada por BNamericas.   

ANÁLISIS

“Queda claro que el Gobierno de México está respondiendo a las presiones de Estados Unidos, que argumenta que se están triangulando productos de acero y aluminio provenientes de China a través de México”, señaló a BNamericas Kenneth Smith, ex jefe negociador del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) por parte de México. 

El consultor socio de Agon recordó que México ya había señalado con anterioridad que estaría fortaleciendo su mecanismo de monitoreo de importaciones.

Las nuevas medidas requerirán además que los exportadores mexicanos provean más información sobre el origen de sus productos. 

Asimismo, EE.UU. seguirá monitoreando si se produce un aumento de las importaciones de artículos de acero provenientes de México y, de ser necesario, se instruirá a la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza para que se elimine la exención de aranceles a las importaciones de estos artículos procedentes de México. 

Si bien la decisión no cae del todo por sorpresa, Smith advirtió que “será importante que el Gobierno de México explique cómo implementará este mecanismo, y se asegure que esto no genere costos adicionales para los exportadores de acero y aluminio de México”.

“Asimismo, habrá que vigilar cómo implementa Estados Unidos estas nuevas restricciones y cuidar que no se conviertan en obstáculos técnicos al comercio en productos que son insumos esenciales para la competitividad de la industria manufacturera de Norteamérica”, destacó.

“El comunicado de la Casa Blanca representa un riesgo para las exportaciones de México, pues no se descarta que todas las exportaciones de acero puedan perder su exención arancelaria en el escenario que no se dé una supervisión adecuada del origen de los productos y que estas exportaciones hacia Estados Unidos sigan aumentando”, explicó en una comunicación para sus clientes la directora de análisis económico de Grupo Financiero Base, Gabriela Siller. 

“Estos aranceles que puso Estados Unidos específicamente para tratar de evitar que fundiciones de metales que vienen de China entren a su país representan un riesgo para las exportaciones de México, porque parte de las exportaciones tienen fundición en China y no en México y en el corto plazo es muy poco probable que México lo pueda cambiar, que esos commodities estén fundidos aquí”, manifestó Ana Azuara, especialista en mercados de commodities de Grupo Financiero Base, en conversación con BNamericas. 

De acuerdo con oficiales de EE.UU., alrededor del 13% de las importaciones de acero y 6% de las importaciones de aluminio provenientes de México fueron fundidas y vertidas fuera de Norteamérica.

“También representa un riesgo porque hacia adelante no sabemos si más del acero que se produce en México pudiera no estar exento de aranceles. Eso sería bastante delicado y podríamos ver una caída mayor en las exportaciones desde México hacia Estados Unidos”, agregó Azuara. 

REACCIÓN DE LA INDUSTRIA

BNamericas consultó a la cámara local del hierro y el acero Canacero sobre los posibles impactos y medidas a tomar por la industria siderúrgica respecto a las nuevas medidas. Su director general, Salvador Quesada, respondió por escrito que sin duda es un tema muy importante para el sector, el cual siguen analizando, y se comprometió a ofrecer una postura al respecto cuando la haya. 

Según datos de Canacero, mientras que México exporta 2,3 millones de toneladas (Mt) de productos terminados de acero a Estados Unidos, este país exporta 4,1Mt de estas mercancías de acero a México. El déficit comercial con este país, entretanto, fue de US$3.200 millones en 2023, “el mayor de la historia”, según el gremio.

La cámara de la industria del aluminio, Canalum, por su parte, informó en un comunicado que, tras hacer un análisis, corroboró que hasta la fecha no existe de manera oficial por parte de la SE la confirmación de las presuntas medidas que se han replicado en medios internacionales para el aluminio. 

“En caso de confirmarse la medida para nuestro sector podemos adelantar que este impuesto afectaría únicamente a las empresas que actualmente importan aluminio de estos países y que transforman y producen para exportación a Estados Unidos, lo que conllevaría a estas empresas a buscar una fuente diferente para surtirse de esas materias primas”, indica el comunicado firmado por Julio Martínez Rivas, presidente de Canalum.

“La medida sí podría afectar la competitividad y sería importante analizar cuáles son los documentos de acreditación de procedencia pertinentes. Es importante enfatizar que nuestra postura es a favor de mantener y apoyar la buena relación con nuestro principal socio comercial, así como la integración de las cadenas productivas de nuestra región T-MEC”, agregó Martínez.

RESPUESTA DE CHINA

"La teoría del 'sobrecapacidad' de China es en esencia una herramienta política utilizada por Estados Unidos para desacreditar y reprimir la economía china", aseveró por correo electrónico Liu Pengyu, portavoz de la embajada china en Washington, al medio La Voz de América. 

"Lo que hay detrás es la desglobalización y el proteccionismo comercial, que obstaculizarán el comercio global y socavarán los intereses comunes de todos los países", concluyó.