Brasil puede liderar la transición energética con Petrobras como “vector”

El cambio del Gobierno Federal de Brasil a principios de año trajo consigo nuevos vientos y la perspectiva de formular una nueva dirección estratégica en Petrobras.

Luego de años enfocada en la exploración y producción de petróleo, la compañía ha volcado su atención a actividades consideradas secundarias, como refinación, gas natural, fertilizantes y petroquímicos.

No obstante, lo que más llama la atención de quienes siguen a la estatal es su apuesta por la transición energética.

Tras anunciar la creación de una junta directiva dedicada a este tema, Petrobras adelantó que pretende destinar entre 6% y 15% de su capex entre 2024 y 2028 a proyectos con bajas emisiones de carbono.

Bajo la presidencia ejecutiva de Jean Paul Prates —quien, desde el Senado, elaboró un proyecto de ley para regular la generación eólica marina en Brasil—, la empresa ha comenzado a redoblar esfuerzos para buscar alianzas en el sector de las fuentes renovables dentro y fuera del país.

En entrevista con BNamericas, el director de transición energética de Petrobras, Maurício Tolmasquim, habla sobre las iniciativas de la empresa en el área y explica por qué todavía tiene sentido aumentar la producción de petróleo.

BNamericas: ¿Cuál es la estrategia de Petrobras para avanzar en la transición energética hacia una economía baja en carbono?

Tolmasquim: Hay dos pilares en la descarbonización. Uno consiste en actividades propias de Petrobras, los denominados alcances 1 y 2. Petrobras lo está haciendo muy bien aquí. Destacamos sobre todo el presal, donde tenemos una productividad muy alta y una intensidad de emisiones de CO2 por barril relativamente baja. El promedio mundial debería rondar los 18kg o 20kg de CO2 por barril, mientras que nosotros estamos en 15kg de CO2 por barril, y en los campos presalinos llegamos a 10kg de CO2 por barril.

El gran reto está en el alcance 3, la descarbonización de nuestros productos y de la cadena productiva. Esto significa generar electricidad y combustible renovable, es decir, tanto electrones como moléculas renovables, lo que nos obliga a diversificar nuestro portafolio. En lugar de limitarnos a derivados del petróleo y gas natural, deberíamos pasar a otra gama de productos, como energía eólica y solar, hidrógeno verde, biocombustibles, etc.

La primera señal clara de la importancia de este tema para Petrobras fue la creación de la mesa de transición energética. El segundo fue la decisión de asignar entre 6% y 15% del capex a inversiones bajas en carbono. Son cuestiones muy objetivas que dan fe de la importancia del tema para nosotros.

[Nota del Editor: De acuerdo con el programa brasileño del protocolo de gases de efecto invernadero, el alcance 1 implica emisiones directas de fuentes de propiedad de la organización o controladas por esta; el alcance 2, emisiones indirectas de la generación eléctrica y/o térmica que compra la organización; y el alcance 3, las emisiones indirectas (no incluidas en el alcance 2) que están en la cadena de valor de la organización y que no son propiedad de esta ni están controladas en su inventario].

BNamericas: ¿Hay conversaciones con potenciales socios en Brasil y en el exterior?

Tolmasquim: Sí, con miras a compartir experiencia, capex y riesgos. Un gran número de potenciales socios nos han contactado con ofrecimientos de asociación, ya sea a través de fusiones y adquisiciones o proyectos totalmente nuevos. Tenemos varias tecnologías en el radar, tanto en Brasil como en el exterior. Por ejemplo, estamos analizando proyectos eólicos marinos en tres países.

En Brasil, varias empresas se nos han acercado con oportunidades que estamos evaluando.

BNamericas: ¿Cuáles son las principales iniciativas en desarrollo y planificación en el segmento de gas natural?

Tolmasquim: El gas cumple en Brasil un papel diferente que en Europa en lo relacionado con la transición energética. Allí, ese papel es muy claro, ya que el gas reemplaza al carbón, que emite el doble que una central térmica a gas, por ejemplo.

En Brasil, como tenemos una matriz muy renovable, no desempeña la misma función, pero sí un papel importante al complementar las fuentes renovables intermitentes. Es un elemento relevante de la seguridad del sistema. Cada vez tiene menos sentido tener plantas [térmicas] operando en carga básica y es más conveniente tenerlas como complemento. Tanto es así que el Gobierno Federal ha estado promoviendo subastas de capacidad de respaldo para contratar estas plantas.

BNamericas: ¿Son las llamadas plantas flexibles?

Tolmasquim: Sí, permiten utilizar una mayor cantidad de energía renovable de forma segura.

Otro papel importante que podría tener el gas en la transición energética es en la industria, como reemplazo del combustible residual e incluso del carbón.

BNamericas: Petrobras ha vendido algunas plantas térmicas en los últimos años, pero tiene planes de construir una en el polo Gaslub. ¿La estrategia es monetizar parte del gas producido en el presal?

Tolmasquim: Estamos estudiando la posibilidad de instalar una planta térmica de 600MW en Gaslub, pero aún no está decidido. La planta se ubicaría junto a la nueva UPGN [unidad de procesamiento de gas natural], por lo que tendría una gran ventaja, ya que no habría costos de transporte. Sería una planta muy eficiente, moderna, que consumiría la menor cantidad de gas posible y tendría las menores emisiones posibles.

BNamericas: ¿Petrobras se está quedando atrás con respecto a otras petroleras mundiales en la transición energética?

Tolmasquim: Como dije, en lo relativo a los alcances 1 y 2, Petrobras lo está haciendo relativamente bien. El alcance 3 no era prioridad para Petrobras hasta ahora. Es algo que la nueva administración ha definido como prioridad. Antes, el enfoque estaba en el upstream. Ahora, creemos que debemos preparar a Petrobras para el futuro y nos estamos preparando mucho para hacer nuevas inversiones y evolucionar.

Nuestro punto de partida podría ser una mayor reducción. Sin embargo, Brasil tiene una base de recursos naturales renovables abundante y de bajo costo, por lo que Petrobras está en condiciones de equipararse a otras petroleras que están más a la vanguardia en descarbonización.

Por supuesto, esto solo puede hacerse durante un tiempo y teniendo en cuenta la gobernanza de la empresa y un valor presente neto positivo. Hay una serie de condiciones para entrar, los proyectos tienen que ser atractivos. Pero creo que Petrobras está bien posicionada para hacerlo.

BNamericas: ¿Qué podría tener más sentido en el corto plazo? ¿La generación eólica marina, dada la potencial sinergia con las operaciones marítimas de Petrobras?

Tolmasquim: La eólica marina es una tecnología que todavía está en desarrollo y tiene costos más elevados que la eólica terrestre. Pero, al mismo tiempo y como señala, tiene una gran sinergia con las actividades de exploración y producción de petróleo costa afuera, por lo que puede aprovechar la capacidad técnica, el equipo, la logística de embarcaciones, entre otros temas, lo que le da una ventaja a una petrolera por sobre sus competidores. Sin embargo, en el caso de Brasil, aún no existe un marco regulatorio. Por eso también estamos mirando al exterior, porque es una forma de ganar experiencia mientras no haya una normativa en el país.

Al mismo tiempo, existen tecnologías más maduras, como la eólica terrestre y la solar, con costos más bajos, tiempos de construcción más breves y retornos de inversión más rápidos. Como con cualquier cartera, necesitamos variar y tener una combinación de alternativas, algunas de largo plazo, otras de corto plazo.

Luego están los biocombustibles. Tenemos, por ejemplo, una gran ventaja comparativa sobre el diésel renovable —considerando el transporte por carretera— que se elabora a partir de coprocesamiento, con 5% a 7% de aceite vegetal, ya que tenemos la unidad de refinación. Por supuesto, será necesaria una adecuación que requerirá inversiones, pero son marginales.

También estamos muy bien posicionados en el transporte aéreo. En RPBC [refinería Presidente Bernardes], ahora vamos a comenzar a construir una unidad que funcionará exclusivamente con aceites vegetales, lo que permitirá la producción de SAF [combustible de aviación sostenible] como prioridad. Esto tiene un gran valor porque, a partir de 2027, habrá un mandato sobre combustibles aéreos, con una gran demanda de SAF en el mundo.

En el caso del transporte marítimo, aún estamos en fase experimental con un buque fletado por Transpetro que funciona con 24% de biodiésel en el combustible bunker. Los resultados han sido interesantes en términos de reducción de emisiones. También hay potencial importante para explorar.

En cuanto a productos químicos, la refinería de Río Grande producirá productos petroquímicos a partir de biopetróleo y aceites vegetales.

BNamericas: ¿A eso llaman petroquímicos verdes?

Tolmasquim: Sí. Estamos hablando de una canasta de productos, cada uno con un mercado diferente, con retorno en diferentes momentos, con diferente madurez tecnológica, y hay que mirarlos a todos.

Luego está la captura y almacenamiento de carbono. Capturamos y almacenamos la mayor cantidad de CO2 en nuestros campos del presal. El año pasado el mundo capturó y almacenó 40 milones de toneladas (Mt) de CO2, y Petrobras capturó e inyectó 10Mt, una cuarta parte del total. Ya tenemos la tecnología. La pregunta ahora es cómo hacer esto en otras formaciones geológicas, más cercanas a la costa, para poder dar servicios. Tanto para almacenar la producción propia de CO2 emitida por nuestras refinerías como la de otras industrias.

Vamos a iniciar un proyecto pionero en [el estado de] Río de Janeiro para capturar 100.000t anuales de CO2 para 2024.

BNamericas: ¿En Macaé, verdad?

Tolmasquim: Correcto. Queremos avanzar hacia un polo comercial, pero también falta un marco regulatorio. Para llevar a cabo un proyecto piloto de I+D, todo lo que necesita es una licencia ambiental emitida por el estado. Un proyecto comercial depende de un marco regulatorio, porque el mar es un bien federal y eso requiere una concesión o autorización.

En resumen, Petrobras está buscando todo tipo de oportunidades. La idea es diversificarse.

BNamericas: Mientras busca avanzar en la transición energética, en los próximos años Petrobras aumentará su producción de petróleo y gas y enfrenta el desafío de ampliar o al menos mantener su relación reservas probadas-producción, lo que implica buscar nuevas fronteras exploratorias, como el Margen Ecuatorial, de gran vulnerabilidad ambiental. ¿Cómo pretenden gestionar todos estos objetivos de forma equilibrada y sostenible?

Tolmasquim: Estas no son cosas contradictorias. A largo plazo, la demanda de petróleo caerá, dadas las acciones que están tomando los países para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero. Hoy en día, muchos bancos no prestan dinero si no hay acciones de descarbonización. Los inversores también tienen criterios en este sentido. Así que no hay forma de evitarlo, la transición energética es una necesidad para la supervivencia de la empresa.

Sin embargo, todavía habrá demanda de crudo en 2050, alrededor de 60 millones de barriles diarios, según la Agencia Internacional de Energía. Los yacimientos actuales se habrán agotado con el tiempo. Si no hay nuevos descubrimientos, la capacidad de producción mundial caerá drásticamente. Debido a que Petrobras tiene petróleo bajo en carbono y competitivo, estamos en condiciones de estar en este selecto grupo de proveedores. Incluso puede ser que algún día se haga una distinción en el mercado entre petróleo con más o menos carbono. Esto genera ingresos que pueden y financiarán la propia transición energética.

El hecho de que Brasil produzca petróleo no significa que el país no pueda hacer un esfuerzo para dejar de depender del petróleo. Brasil puede y debe invertir tanto como sea posible en vehículos que funcionen con biocombustibles, vehículos eléctricos y generación eléctrica renovable, pero aún habrá demanda mundial de petróleo que generará ingresos para el país. El mundo necesitará el petróleo de Petrobras. Brasil tiene todas las condiciones para liderar la transición energética y Petrobras puede ser un vector en ese proceso.

BNamericas: ¿Petrobras tiene planes de explorar litio en Bolivia u otro país vecino con miras a producir baterías?

Tolmasquim: No tenemos ningún plan, pero no descartamos evaluar el tema del litio, que es un elemento importante en la transición energética. Queremos integrarnos con los países vecinos y el litio es una de las posibilidades, pero hay otras áreas que son más inmediatas, porque están más directamente relacionadas con la energía.