El potencial de Chile para convertirse en líder mundial de hidrógeno verde

El hidrógeno verde promete modernizar los sectores de la minería y el transporte en Chile.

El gobierno lanzó una estrategia nacional cuyo objetivo es alcanzar los 5GW de capacidad de electrólisis instalada en 2025, convertir a Chile en productor del hidrógeno verde más económico del mundo en 2030 y en uno de los tres principales exportadores en 2040.

El sector minero es un motor para alcanzar estos objetivos, según el plan del gobierno, ya que las mineras podrían ayudar a probar y desarrollar maquinaria ecológica propulsada por hidrógeno y facilitar las exportaciones.

Para promover la industria chilena del hidrógeno verde, el Banco Mundial aprobó una financiación de US$150 millones, que forma parte de un megaproyecto de US$431 millones en el que también participan agentes públicos y privados.

BNamericas conversó con Paula Ortiz, líder de desarrollo de negocios de la firma de ingeniería y consultoría Arcadis, sobre los proyectos y el panorama del hidrógeno verde en Chile.

BNamericas: ¿En qué condiciones está Chile para desarrollar una industria del hidrógeno?

Ortiz: Las energías renovables aún están a escala mediana y para producir los niveles de hidrógeno que requiere el mundo se necesitan proyectos de energía con mayor envergadura. Hablamos de unas 100.000 hectáreas entre parques eólicos y solares, y plantas de proceso. 

Se requiere también un análisis de criterios múltiples con aspectos de ingeniería y herramientas digitales para integrar los aspectos ambientales y sociales del lugar donde estarán los proyectos. Es importante considerar la información de otros proyectos. 

La zona norte [Región de Antofagasta] y el extremo sur [Región de Magallanes] son los lugares con el mayor potencial para implementar proyectos de hidrógeno a gran escala. Tienen, por ejemplo, líneas eléctricas, gasoductos y acueductos que cruzan sus territorios. 

BNamericas: ¿Cómo puede contribuir el sector de la minería?

Ortiz: La minería tiene muchas superficies que podrían cubrirse con paneles solares, en la medida que vayan quedando en desuso. Anglo American instaló paneles sobre su depósito de relaves [Las Tórtolas]. Son iniciativas a considerar. 

Los proveedores de maquinarias mineras están haciendo esfuerzos por generar motores duales, que pueden funcionar tanto a diésel como hidrógeno para no depender de un solo combustible. 

BNamericas: La energía verde es clave para la producción de hidrógeno. ¿En qué condición está la industria minera chilena al respecto? 

Ortiz: Las condiciones de la minería en el norte son bastante favorables para la autogeneración de energía, gracias a la radiación solar. Además, gran parte de la minería ya tiene plantas desalinizadoras, y eso les hará más fácil avanzar en la reducción de las emisiones provenientes de maquinarias pesadas, camiones o montacargas.  

BNamericas: ¿Qué opina de la estrategia nacional del hidrógeno verde del gobierno? 

Ortiz: Chile es uno de los pocos países que tiene una estrategia al respecto. Lo que hace falta es generar el ambiente para coordinar los proyectos. 

En el caso de la aplicación, hay fondos del Estado para concursar proyectos, ya sea para la minería, aeropuerto, movilidad y otros ámbitos. Pero, aún hace falta un doble clic para que los agentes ayuden a coordinar los grandes proyectos que pueden colaborar con la diversificación de la matriz. Debe considerarse: generación, energía, agua desalinizada, procesos, exportación, accesibilidad a puertos, etc. 

BNamericas: ¿Existe un marco legal apropiado para impulsar la industria del hidrógeno verde en Chile? 

Ortiz: Existe una estrategia y guías para la obtención del permiso ambiental que es primordial para los proyectos, pero en este minuto no hay una normativa específica asociada al hidrógeno. 

Más bien se están haciendo adecuaciones o revisiones que permitirán, por ejemplo, ver los temas de la seguridad con [el regulador de electricidad y combustibles] SEC para el manejo de las sustancias en la producción. También existen normativas para la generación, tanto solar como eólica, y materias atingentes a los procesos productivos. Pero, falta un lineamiento más específico para los proyectos de gran escala.

BNamericas: ¿Qué áreas son cruciales para aplicar el hidrógeno en Chile? 

Ortiz: Sería interesante que se logre movilizar un avión con este combustible, ya que generan bastantes emisiones, al igual que el transporte marítimo u otras formas de movilidad donde no funciona la electrificación. 

Se deberían convertir al hidrógeno todos los buses que están en localidades con mala calidad del aire. En ese sentido, la minería tiene una oportunidad para aplicar el hidrógeno en la reducción de las emisiones en sus localidades.

BNamericas: ¿Existe un mapa a nivel nacional que identifique los puntos clave de generación, almacenaje y distribución para la industria del hidrógeno? 

Ortiz: Se han iniciado conversaciones para que tanto la generación, producción y exportación lleguen a puerto. Incluso han venido representantes del puerto de Róterdam, desde Países Bajos, a visitar Chile para entender la dinámica. En un principio se veía al hidrógeno como un todo, pero ahora se entiende que es un ecosistema de varias partes. 

BNamericas: ¿Qué región está mejor preparada en infraestructura y potencialidad energética: Antofagasta o Magallanes?  

Ortiz: Se podría pensar que la región de Antofagasta, ya que tiene todo un sistema armado con puertos, pero igual se va a necesitar adecuaciones, como mejorar las vías de acceso. Gracias a la minería quizás Antofagasta esté mejor preparada; pero la zona sur, precisamente Punta Arenas, también tiene una historia de exportación y experiencia en sacar y recibir combustibles desde su puerto a través de Enap y Methanex. Pero, también requiere adecuaciones para estar en condiciones de recibir los insumos y exportar hidrógeno. 

Ambas tienen virtudes que se pueden complementar. Es importante revisar las vías de accesos, ya que la implementación de los proyectos requerirá una alta movilización de insumos. 

BNamericas: ¿Qué simboliza el financiamiento de US$150 millones del Banco Mundial?

Ortiz: El Banco Mundial ha desarrollado mucho la línea de la sostenibilidad, e investigado para establecer estándares. Al venir del Banco Mundial se aumenta la importancia del tema a nivel global, incentivará los proyectos, y generará más preocupación por las exigencias en seguridad. 

BNamericas: ¿De qué trata la estrategia del hidrógeno verde de Arcadis? 

Ortiz: Nuestro comité de hidrógeno posee una mirada multidisciplinaria con áreas como sostenibilidad, ingeniería, electricidad, medio ambiente, permisos, aspectos sociales y estándares internacionales. 

Esto porque entendemos que un proyecto de hidrógeno de gran escala incluye varias partes, tales como la generación de energía, transmisión, producción, operación de procesos, plantas desalinizadoras, exportación, comercialización, proceso de cierre, etc.

La industria del hidrógeno será relevante tanto para la industria minera como para los demás sectores que deben reducir sus emisiones. Sabemos que los camiones y la maquinaria de alto tonelaje en minería no pueden ser electrificados, pero tal vez sí puedan pasar al hidrógeno.