Expresidente de Perú Pedro Pablo Kuczynski: "Este entorno internacional volverá las cosas más difíciles en la región"

Pedro Pablo Kuczynski gobernó Perú de 2016 a 2018, cuando renunció antes de votarse su destitución en medio de acusaciones de recibir pagos ilegales del gigante de la construcción Odebrecht, algo que el exbanquero de Wall Street ha negado mientras la causa judicial sigue sin resolverse.

Hoy, el hombre conocido como PPK, está retirado de la política, pero tiene una clara opinión sobre el actual presidente de Perú, Pedro Castillo; el intento de Chile por redactar una nueva constitución; el papel del Estado en la economía y la corrupción

(Nota del editor): La entrevista se realizó antes del referendo de Chile en que los votantes rechazaron la propuesta constitucional).

BNamericas: ¿Qué opina de la propuesta constitucional en Chile y los cambios que ha estado experimentando la minería chilena?

Kuczynski: Soy un tanto escéptico del tipo de propuestas con las cuales llegó el señor Boric a la presidencia y con las cuales se eligió a la Asamblea Constituyente. Espero que la propuesta sea rechazada, aunque seguirán apareciendo iniciativas similares. Tampoco veo operativa la creación de una empresa nacional del litio. Chile fue el país que más creció en América Latina en los últimos 25-30 años e incluso inspiró reformas en otros países. Ahora Chile se está bajando un poco del tren y no sabemos qué pasará. Pero confío en que saldrá adelante.

BNamericas: ¿Qué perspectivas tiene para América Latina?

Kuczynski: Está complicada. En Argentina la inflación está descontrolada y en Colombia han aparecido políticas antimineras. China que ha sido el motor de las exportaciones en Chile y Perú, y ahora se está frenando. El cobre seguirá a un buen precio debido a la electrificación de las economías globales, pero los precios estratosféricos de hace un año ya no están. Ahí aparece el litio en el caso de Chile y el zinc en Perú, pero ambos dependen mucho también de China. Europa se está yendo a una recesión fulminante. Este entorno internacional volverá las cosas más difíciles en la región.

BNamericas: ¿Qué opina de que el Estado tenga un mayor protagonismo en las políticas mineras, así como en otros sectores industriales?

Kuczynski: El Estado debiera crear un ambiente propicio para los ciudadanos en las áreas de educación, salud y seguridad. Las actividades comerciales, como la agricultura y la minería, no debieran ser articuladas por el Estado. Esto ha sido demostrado durante décadas en América Latina, especialmente después de la crisis de deuda que tuvimos hace 40 años. Los ochenta fue una década de reajustes debido, precisamente, al exceso de empresas estatales.

Cuando fui presidente de Perú, era difícil privatizar el agua potable, porque ninguna empresa comercial quería prestar servicios en las zonas más pobres del país. Entonces tuve que mantener el agua en manos del Estado. Actualmente, la mayoría de las operaciones de electricidad, como las hidroeléctricas o las plantas de ciclo combinado a gas, son privadas. Pero se han mantenido algunas generadoras y distribuidoras estatales que yo cree cuando fui ministro de Energía y Minas. Estatizar los servicios básicos no es una buena idea, salvo en algunas excepciones.

BNamericas: ¿Cómo han impactado a Perú hechos internacionales como la pandemia, la guerra de Rusia y Ucrania o la ralentización de la economía china? 

Kuczynski: La situación económica aquí es tiempo perdido, pero no catastrófica. El COVID-19 nos golpeó mucho, porque el gobierno no lo supo manejar bien. Cerca de dos millones de personas quedaron sin empleo. Esto se ha recuperado ahora, pero el gobierno no está interesado en invertir. Hay muchos proyectos que no avanzan. Como resultado, Perú crecerá al 2-3%, cuando podría estar creciendo al doble. Las exportaciones han subido gracias a decisiones que se adoptaron años atrás. A partir del próximo, no hay claridad hacia dónde iremos. Perú es un país financieramente sólido y con muchos proyectos. Solo con un cambio de gobierno se podrían retomar estos objetivos.

BNamericas: En el sector minero peruano, algunos proyectos han debido afrontar bloqueos a sus operaciones. ¿Cómo ve la situación?

Kuczynski: Hemos tenido más conflictos este año. Tuvimos una primera ministra [Mirtha Vásquez] que era una activista antiminera. Esto provocó ataques a algunas minas y generó una crisis de desconfianza. Pero ya pasó. Hoy tenemos grandes proyectos, como Antamina, de propiedad de BHP; Mitsubishi y Glencore, que no tiene problemas sociales, sino un programa activo. Cerro Verde, de Freeport McMoRan, también está bien. Southern Perú ha tenido varios conflictos, pero mi impresión es que los está superando. Las Bambas está en una situación sui géneris, promovida por personas que tienen intereses personales y utilizan a la población aledaña para crear demandas. Después tenemos Quellaveco, de Anglo American, que acaba de empezar y ha hecho un gran esfuerzo para evitar problemas.

Los conflictos de la minería nacen, en gran medida, debido al agua, porque las minas están en zonas andinas donde los reservorios son un problema. La empresa Southern tiene un proyecto muy bueno, Tía María, donde el uso del agua generó una gran oposición, pero la compañía cambió su proyecto y empezarán a operar con agua de mar desalinizada. Los problemas se resuelven, pero se necesita un gobierno que entienda la importancia de la actividad minera.

Hemos tenido casi setenta ministros en un año, y en minería, tres. El sector minero tiene un raudal de proyectos que pueden despegar. Están también los proyectos Haquira, Michiquillay, Galeno y Zafranal. O sea, puedo mencionar 30 proyectos de memoria. Los conozco todos. Podría haber un auge, pero solo hay un crecimiento mediocre.

BNamericas: ¿Qué opina de la política peruana?

Kuczynski: La política peruana siempre ha sido muy controversial. Fui ministro de Fernando Belaunde y fui derrocado en un golpe. En su segundo gobierno, siempre hubo la amenaza de problemas. Después tuvimos a Alberto Fujimori, que debería haberse quedado cinco años y se quedó diez. Mi gobierno fue aniquilado por la señora Keiko Fujimori por razones personales y esto generó mucha inestabilidad. Tener una política ordenada requiere partidos políticos serios. También necesitamos empresarios que aporten a la política. La mayoría de los líderes empresariales en Perú, ni siquiera viven aquí, lo que es un problema.

BNamericas: ¿Qué opina del mandato del presidente Castillo? ¿Estima una salida anticipada?

Kuczynski: La derecha quiere que se vaya, pero el Congreso no tiene los votos para lograrlo. Tampoco veo quién podría ser su reemplazo. Habrá que buscar un pacto para que él pueda gobernar con tranquilidad. Recién cambiamos al quinto jefe de la Policía en un año. Esto es inviable.

Todo empezó en 2018 cuando la señora Keiko Fujimori se coludió con Odebrecht y con mi vicepresidente para sacarme. Desde ahí hemos tenido al señor [Martín] Vizcarra por dos años y medio, que la historia juzgará como un mal gobierno. Después vino el presidente del Congreso [Manuel Merino], que duró cinco días. Luego el señor Sagasti, que trabajó bien durante los pocos meses que estuvo. Finalmente llegó Castillo, quien ganó la elección con las justas.

Y quién levantó a Castillo fue la señora Fujimori, cuando me hicieron una huelga de maestros en 2017 después de que mi gobierno les hubiese dado un aumento de sueldo del 80%. Los fujimoristas estaban empeñados en sacarme. Entonces, apoyaron a Castillo, pero ahora se quejan de él. Hay un gran desorden aquí.

Hemos tenido buenos presidentes, como Alan García, pero faltan instituciones serias. Si recordamos a [Augusto] Leguía, fue un presidente exitoso, pero lo dejaron morir en la cárcel y nadie dijo nada. A mí me tuvieron encarcelado tres años y nadie dijo nada tampoco. Nos falta un sentido de nación. No estamos tan mal, pero podríamos estar mucho mejor.

BNamericas: ¿Cómo está la inversión privada y la confianza empresarial en esta inestabilidad política?

Kuczynski: La inversión privada está baja y no crece. Hubo una recuperación después del peak del COVID y el turismo ha renacido un poco, pero tanto el Congreso como el gobierno emiten decretos y leyes que van en contra de la inversión. Crearon una ley contra la tercerización que, si bien han existido algunos abusos, ha permitido a la industria agroexportadora, por ejemplo. Hay reglamentos exagerados. Aun así, este gobierno y el Congreso no han dado ninguna medida mortal para la inversión y no ha habido nacionalizaciones.

BNamericas: ¿Cómo se podría solucionar el conflicto político actual? 

Kuczynski: Necesitamos una nueva generación de gente joven que esté interesada en el país. Hace 60 años fui gerente del Banco Central. Hace 40 años fui ministro de Energía y Minas. Hace 25, fui ministro de Economía. Por lo tanto, conozco todo Perú, pero muy poca gente joven conoce el país. Muchos están sentados en Lima y cuando tienen vacaciones se van al extranjero. Eso está bien, pero falta gente comprometida. Si la gente no tiene confianza en su país, no se puede avanzar.

BNamericas: ¿Qué urgencias existen en obras públicas?

Kuczynski: Tenemos inmensas necesidades de agua potable, porque todavía hay gente que no tiene agua por 24 horas en sus casas. Se requieren más alcantarillados, colegios y hospitales. Con el COVID quedó demostrado que no tenemos suficientes camas de cuidados intensivos y faltan sistemas de oxígeno y personal. En los últimos años, Perú ha exportado a Estados Unidos, Brasil y España 60.000 médicos y 100.000 enfermeras. Estamos atrasados en muchos aspectos e inversiones. El organismo que debiera promover las inversiones, que se llama ProInversión —el cual yo cree en 2001— en este momento está durmiendo el sueño más profundo. Pero estoy alentado con el nuevo ministro de economía [Kurt Burneo], quien fue mi viceministro. Es una persona sensata, así que ojalá veamos cambios.

BNamericas: La cuñada del presidente Castillo ha sido acusada de delitos de corrupción. ¿Cómo ha visto este tipo de situaciones en el actual gobierno? 

Kuczynski: La corrupción de la cual se habla no es importante. Lo que se necesita es un esquema político y salir de las tonterías de estar hablando del sueldo del presidente, que es 15.000 soles, cerca de US$4.000. Los sueldos de los ministros hoy son los mismos que hace 25 años. En términos reales y cifras nominales, han bajado.

Lo más importante es reformar al Poder Judicial. En Perú la ley no rige. El tribunal constitucional declaró que el señor Alberto Fujimori podía irse a su casa hace seis meses atrás. Pero el señor Fujimori sigue en la cárcel, mientras que el señor Antauro Umala, que asesinó a cuatro policías en 2005, está libre por una decisión de este gobierno. Esto da una impresión lamentable.