Furukawa: "Los principales clientes empiezan a ser los centros de datos, en lugar de las telcos"

América Latina sería una de las regiones que más se beneficiará de la unificación e integración de las operaciones de fibra de la empresa japonesa Furukawa en la unidad Lightera.

Esa es la opinión de Foad Shaikhzadeh, quien durante años dirigió Furukawa Electric Latam (FEL) y ahora será presidente y CEO global de Lightera.

La marca se lanzará oficialmente el 1 de abril y reemplazará a FEL y las operaciones OFS en Estados Unidos y UHFC en Japón.

En su primera entrevista después de la reestructuración y en su nuevo cargo, Shaikhzadeh conversa con BNamericas sobre los planes del gigante japonés para América Latina, la competencia con China, el conflicto comercial y más.

BNamericas: ¿Cómo fue el proceso de reestructuración y creación de Lightera?

Shaikhzadeh: Este proyecto empezó hace cuatro años, cuando el mercado estaba más activo. No empezó hace poco.

De todos los principales fabricantes de cables y fibra óptica, éramos los únicos con operaciones descentralizadas por región: América Latina, Norteamérica, EMEA, Sudeste Asiático y Japón.

Estas regiones tenían competencias muy diferentes y no colaboraban como debían. Por ello, me nombraron en un principio presidente del directorio de OFS para preparar este cambio.

A lo largo de dos años fuimos preparando varios equipos con diferentes funciones para implementar esta nueva estructura.

La división de soluciones ópticas se llamará Lightera como nombre global, en lugar de Furukawa u OFS. El acrónimo OFS corresponde a la división de Lucent adquirida por Furukawa; no era el nombre de una empresa, sino una solución. Buscábamos una marca con proyección global.

BNamericas: ¿Y qué cambia a partir de ahora?

Shaikhzadeh: Esta compañía reúne experiencias de diversos lugares. Cada uno tiene diferentes fortalezas. En Japón, la firma es conocida por sus cables de ultraalta densidad de fibra [UHFC] y su gran densidad de fibras.

En la actualidad, Fiber Count fabrica cables con 6.912 fibras para centros de datos de hiperescala, que tienen demanda en varias partes del mundo, y está aumentando esa cantidad a 13.000 y pronto a 13.924 en un solo cable.

En Estados Unidos se producen fibras y fibras especiales. Hemos comenzado a aumentar nuestra presencia en EE. UU. también para estas hiperescalas. En Dinamarca, la empresa fabrica fibras submarinas.

El mercado de las telecomunicaciones está cambiando. Los principales clientes empiezan a ser los centros de datos, en lugar de las telcos.

El debate se ha centrado en las oportunidades que ofrece la inteligencia artificial generativa. La demanda está migrando desde las telcos hacia las vinculadas a la inteligencia artificial generativa. Para muchos, la conectividad y la compañía de telefonía representan solo una parte del servicio.

Por supuesto, la empresa sigue abasteciendo a importantes clientes en el sector de la telefonía, pero busca ofrecer servicios completos.

En Japón, ya ofrece centros de datos y está expandiendo su presencia en Estados Unidos a hiperescaladores. En Brasil, presta servicios a multiinquilinos y centros de datos tradicionales y de borde. Aún estamos iniciando hiperescaladores en el país.

BNamericas: ¿Cómo será la operación en América Latina?

Shaikhzadeh: La operación se llamará Lightera Latam, mientras que en Estados Unidos se llamará Lightera LLC. Promoveremos el intercambio de conocimientos y experiencias entre las unidades para satisfacer mejor la demanda del mercado de inteligencia artificial, conectividad e internet de las cosas [IoT].

Aunque la IoT no ha despegado como se esperaba con 5G, la combinación de [los cables] PON-LAN y wifi puede impulsar su evolución, incluso la provisión de sistemas de IA.

Lightera tiene tres segmentos operativos principales: Norteamérica, Latinoamérica [con EMEA] y Asia Pacífico. Además, existe el segmento de fotónica especializada, centrado en aplicaciones especiales de fibra, incluida la fibra submarina.

Cada región tiene unidades de redes, redes de comunicación, bajo las cuales se encuentran las telcos.

Luego está la infraestructura de conectividad con dos grupos: centros de datos de hiperescala y empresas. Además, existen otras actividades, como IoT. Estos elementos forman parte de la infraestructura de conectividad y es probable que este sector crezca significativamente.

Y existe una tercera área, conocida como redes avanzadas. Esta área aún está en desarrollo y se encarga de las redes para ciudades inteligentes y compañías eléctricas.

BNamericas: El mercado latinoamericano ha experimentado bastantes dificultades en los últimos años, dado el cierre de varias fábricas. ¿Cómo están las operaciones ahora?

Shaikhzadeh: Nuestra fábrica en Colombia era la única dedicada exclusivamente a la producción de cables ópticos para telecomunicaciones y competía ante todo con compañías chinas. No había justificación suficiente para mantener las operaciones allí. Curiosamente, hoy vendemos dos o tres veces más en Colombia que cuando teníamos la fábrica.

Esta fue una decisión acertada y basada en los intereses de la empresa. Si bien desagradó al Gobierno colombiano y provocó la pérdida de empleos, la realidad es que, en un mundo cada vez más conectado, es necesario encontrar la mejor manera de atender al cliente utilizando los recursos globales disponibles en cada región.

Nuestro análisis de la operación en Colombia reveló que no tenía mucho sentido mantener la planta.

En contraste, observamos que México implementó fuertes protecciones para el sector, imponiendo un arancel de importación de 35 % a los cables ópticos para contener la competencia china. Esto llevó a un fabricante chino a instalar una fábrica en México, por lo que estamos transfiriendo las máquinas desde Colombia.

La manufactura tiende a desplazarse hacia donde encuentra protección gracias a políticas industriales sólidas y a la demanda de los clientes. Brasil necesita idear una política industrial sólida que fomente el empleo y la producción local.

Hace poco discutimos este tema con competidores, y la opinión general es similar, especialmente después de la disrupción causada por la pandemia y el desequilibrio entre la oferta y la demanda.

BNamericas: ¿Cómo va ese proceso en México?

Shaikhzadeh: Tomó un tiempo terminar la producción de las maquinarias en Colombia, y hay algunos aspectos que debían ultimarse.

Hubo demandas relacionadas con el gobierno, los sindicatos y los impuestos, además estaba la necesidad de completar varios trámites burocráticos en la zona franca. Este proceso se completó en diciembre del año pasado.

Los equipos se trasladaron a México y se cargaron en barcos a fines de enero o principios de febrero. Actualmente, están en camino y deberían arribar en una o dos semanas. Luego, iniciaremos la operación. Un nuevo gerente de fábrica, que es brasileño, supervisará la instalación y operación de toda la planta.

La fábrica comenzaría a producir y entregar productos en agosto y con mayor capacidad en comparación con la unidad que había en Colombia.

BNamericas: ¿Qué tan estratégico es México y cómo se verá afectada la operación por la guerra comercial de la administración de Donald Trump?

Shaikhzadeh: México es la segunda economía más grande de la región, después de Brasil. Durante este período, hemos recibido varios pedidos en México, pero nos hemos visto frenados por la necesidad de producir y enviar desde Brasil.

En México, algunos productos provienen de fábricas en Estados Unidos y, hasta el momento, están libres de aranceles. Esperemos a ver cómo evoluciona esto. Los cables para centros de datos de mayor capacidad se fabrican en Estados Unidos.

BNamericas: Ustedes organizaron el cambio de Colombia a México antes de la elección de Trump y la fábrica ampliada ya está lista para comenzar a operar bajo el nuevo gobierno estadounidense y en medio de una guerra comercial. ¿Ha cambiado algo en su estrategia?

Shaikhzadeh: Nuestro enfoque se mantiene sin cambios. Tenemos nuestra fábrica en Estados Unidos con capacidad para atender el mercado nacional, e incluso estamos ampliando algunas líneas.

La fábrica en México atiende a México, Centroamérica y el norte de Sudamérica, siempre considerando la economía.

Las ventas de México a Estados Unidos nunca fueron consideradas en el caso práctico. Claro que, si no hay problemas arancelarios, si el precio es favorable y la planta tiene capacidad ociosa, la planta de México también podría vender a Estados Unidos. Pero ese no es su objetivo.

BNamericas: ¿Qué pasa con la manufactura en la ciudad brasileña de Curitiba? El gobierno aumentó los aranceles de importación a la fibra y hay una investigación antidumping en curso…

Shaikhzadeh: El gobierno anunció el proceso antidumping sobre la fibra y no participamos; lo llevó a cabo exclusivamente Prysmian. El gobierno extendió el plazo desde fines de junio para tomar una decisión final en febrero de 2026.

En el caso de los cables ópticos, hay mucha más evidencia disponible de dumping.

No está claro si se tomará una decisión provisional para junio, pero esperamos que el plazo no se prorrogue y que se adopte una decisión antes. Sigue existiendo una intensa competencia de China, cuya influencia global ha disminuido, aunque no por completo.

La demanda en China ha caído significativamente, lo que ha provocado el cierre de algunas fábricas, pero otras siguen operando. En Europa, se han trasladado muchos equipos a Polonia para eludir las políticas antidumping, aunque no todos los productos y diseños se producen allí. Se cree que cuatro o cinco fábricas chinas se han reubicado allí.

En Brasil no se han instalado nuevas fábricas, por lo que seguimos teniendo las mismas empresas chinas.

Algunos fabricantes chinos apoyan el proceso antidumping de cables. Estos tienen operaciones en Brasil. Quienes se oponen son los distribuidores de productos chinos, que no tienen fábricas allí.

BNamericas: ¿Cómo está la capacidad de producción en Brasil?

Shaikhzadeh: Nuestra ocupación se mantiene en torno al 30-40 %. Habíamos planificado inversiones que se suspendieron mientras no se aclare la situación, ya que existe suficiente demanda para cubrir nuestras necesidades.

Esperamos que el gobierno implemente una política industrial más definida en el futuro. Es estratégico tener una fábrica en Brasil para compensar cualquier escasez de suministros.

Hemos tenido varios casos de clientes que compraron productos importados a bajo precio y no los recibieron, por lo que recurrieron a nosotros de urgencia. Logramos satisfacer esta demanda urgente a precios justos.

BNamericas: ¿Cuál es la actual distribución de ingresos entre los segmentos de telecomunicaciones de Furukawa en América Latina?

Shaikhzadeh: En la región, el mercado de las telecomunicaciones aún enfrenta desafíos. Esto se debe principalmente a la [retrasada] monetización de las inversiones, en especial en 5G. Este es un problema global, pero también afecta a la región. El mercado de centros de datos, ahora llamado infraestructura de conectividad, continúa expandiéndose. En cualquier caso, somos un claro líder en Latinoamérica.

En Brasil, tenemos el 61 % del mercado. En Latinoamérica en general, el 27 %. En Chile y Perú hemos crecido de manera significativa. En Perú, somos líderes con el 24 % del mercado. El objetivo para este año es expandirnos en México.

En Colombia, el crecimiento ha sido más rápido que antes. Sin necesidad de administrar una fábrica, ahora nos centramos en aumentar las ventas. En Argentina, hemos mantenido un sólido liderazgo durante años.

El objetivo general es ser líderes en otros países de la región. Intercambiamos nuestra experiencia en productos y servicios, y el cambio de marca podría beneficiar a nuevos mercados.