Industria colombiana del acero anticipa nuevos aranceles de importación

El dominio del acero chino en el mercado mundial y sus bajos precios de exportación han encendido las alarmas en todo el mundo.

De acuerdo con la Asociación Mundial del Acero, China produjo en 2023 el 54% del acero del mundo, seguida de India (7%), Japón (5%), Estados Unidos (4%) y Rusia (4%).

El año pasado, Latinoamérica importó alrededor de 10 millones de toneladas (Mt) de acero chino, casi 17% de la producción de la región, según datos de la asociación latinoamericana Alacero.

Las internaciones baratas están poniendo en jaque a los productores latinoamericanos, a tal punto que Brasil, Chile y México debieron imponer aranceles a las importaciones de acero de China. Colombia se prepara para hacer lo propio.

BNamericas conversa sobre la situación en Colombia con Daniel Rey, presidente del comité de productores de aceros de la asociación empresarial colombiana ANDI.

El comité se comprometió con el gobierno de Gustavo Petro a elaborar un estudio de prefactibilidad para la construcción de una planta de aceros planos en Colombia. Este paso es crucial para fortalecer la reindustrialización, formalizar la extracción de carbón metalúrgico y mejorar la eficiencia y estándares ambientales y sociales de la producción de coque limpio, señaló a principios de septiembre el presidente de la agencia minera ANM, Álvaro Pardo.

La industria siderúrgica colombiana comprende cinco empresas. Acerías Paz del Río, Diaco y el Grupo Siderúrgico Reina operan en la región de Boyacá, en el centro del país. Más al sur está Ternium, con una acería en Manizales, y hacia el suroccidente, Sidoc.

Ternium también estrenó en el norte del país hace unos cuatro años una planta laminadora, que actualmente es la más moderna de América Latina.

BNamericas: ¿Cuál es la situación de la industria siderúrgica en Colombia?

Rey: Colombia produce aceros largos por entre 1,3 millones y 1,4 millones de toneladas anuales. La industria genera alrededor de 50.000 puestos de trabajo entre directos e indirectos, con tecnología de reducción de chatarras, con excepción de Paz del Río, que fabrica acero a partir de reducción de mineral de hierro.

Al momento la industria enfrenta, básicamente, un problema de precios por la competencia desleal y la caída de la demanda interna del sector de la construcción.

La competencia desleal implica una distorsión de los precios del acero importado, que llega entre 40% y 42% por debajo del precio en mercados referentes como Brasil o México, lo cual obliga a las empresas en Colombia a bajar sus precios a niveles que no cubren los costos de producción.

Hace poco más de un año, cuando la distorsión era de entre 20-22%, hicimos una solicitud de medidas de defensa comercial al gobierno.

BNamericas: La principal preocupación por los bajos precios es China. ¿También les preocupa el acero que llega de otros países?

Rey: Podríamos decir que China es el gran problema mundial, pero como tiene una posición dominante en el mercado incide en el comportamiento de los demás jugadores.

Desde Rusia y Turquía a veces tenemos también ingreso de material a precios por debajo de los costos de producción, y también desde Perú.

Si hablamos de barra corrugada, tenemos problemas con Perú y con Turquía, a veces con Rusia. Rusia y China están más presentes en alambrón trefilable.

BNamericas: ¿Cuáles son específicamente las salvaguardas que están pidiendo?

Rey: Aranceles para la importación de Perú y aranceles para las importaciones de China, Rusia, Turquía, Vietnam e India.

No hemos recibido acero de Vietnam e India, pero en cualquier momento podría ocurrir, pues cuando un jugador tan importante como China tiene este tipo de comportamientos [bajos precios], incide en el comportamiento de los demás, desordena el mercado y de repente empieza a ingresar acero de países de los que no se esperaba.

BNamericas: ¿Cuál es el nivel de aranceles que esperarían para que se recupere la industria?

Rey: La distorsión de precios está en el orden del 40%. Nosotros pedimos el consolidado de la OMC [Organización Mundial de Comercio], es decir, hasta 35%, que es el máximo.

Actualmente, el arancel para el alambrón está en 5% y, para las barras, en 10%.

En el caso de Perú, el arancel sería de 14,5%, pero con un contingente de 29.000t que entrarían con cero arancel pues, por la normativa de la Comunidad Andina de Naciones (CAN), se debe respetar el flujo de comercio de los últimos 3 años, que es de 29.000t por año. Desde la tonelada 29.001, entraría con arancel de 14,5%

Esperamos que en los próximos días o semanas se expidan los decretos de salvaguardias para la barra corrugada y el alambrón de bajo carbón.

BNamericas: ¿A qué obedece la caída de demanda del acero que mencionó?

Rey: En la baja demanda influye el incremento muy fuerte que hubo en las tasas de interés. Las de crédito hipotecario subieron hasta 18% para contener la alta inflación, cuando veníamos de tasas de poco menos de 9%.

En la caída de la demanda también influyó un problema de ciclo. Durante 2020, en la pandemia del COVID-19 y en 2021 y 2022, hubo una venta récord de viviendas y era lógico ver una corrección de esa tendencia. Para 2023 hubo caídas de alrededor de 50%.

Adicionalmente, hay un tema de pérdida de confianza del consumidor, asociado con algunos cambios que hizo el gobierno con los programas de vivienda.

En lo que resta de este año y el primer semestre del próximo se verá una mejora, pues las tasas de interés están reduciéndose. Sin embargo, creería que una recuperación importante comenzará a verse hacia el segundo semestre de 2025.

BNamericas: El presidente Gustavo Petro quiere una planta de acero plano en Colombia. ¿La industria ha aceptado el desafío?

Rey: Nosotros realizaremos el estudio de prefactibilidad para la acería de planos que busca el presidente Gustavo Petro.

En Colombia hay una industria de aceros planos que, por ahora, solo lamina, pero no produce el planchón, que es la base, el primer producto de una acería de planos.

El objetivo sería tratar de tener todo el encadenamiento y llegar, por ejemplo, a las industrias aeronáutica, de electrodomésticos, automóviles, astilleros. Por eso el gobierno habla de una industria de alto valor agregado.

El proyecto para montar una fábrica de aceros planos aún está en etapas iniciales, arrancará con el estudio de prefactibilidad.

Según el acuerdo al que llegamos con el gobierno, una vez que se firmen las salvaguardas arrancamos con el estudio.

BNamericas: ¿Cuánto tomará hacer el estudio y en qué tiempo se instalaría la planta?

Rey: Para el estudio arrancaremos con una visita a una planta de aceros planos en Argentina, como parte de una invitación de Ternium, que tiene participación no solo en Colombia, sino en toda América Latina e incluso en Estados Unidos y Europa.

El gobierno nos ha pedido que aceleremos el estudio y trataremos de tenerlo listo en unos cuatro o seis meses.

BNamericas: ¿Cuáles podrían ser los obstáculos para concretar la construcción de la planta?

Rey: Podrían ser varios. Por ejemplo, que falte energía; que no haya recursos necesarios porque la chatarra esté escasa; la disponibilidad de mineral de hierro, pues el que hay en Colombia es de bajo tenor; temas de seguridad jurídica, temas de mercado, entre otros.

Todo eso lo determinará el estudio, así como las condiciones necesarias para que el proyecto funcione. Estas podrían incluir una política arancelaria de protección a una industria naciente, firmar y acelerar contratos de minería que permitan la extracción de mineral de hierro, es decir, que promuevan su exploración y explotación, o la búsqueda de un aliado, que podría ser Venezuela, que tiene mineral de hierro de muy buena calidad.