Peruana Unacem busca apoyar la construcción de infraestructura sostenible y resiliente

Compañías como el grupo peruano de cemento y energía Unacem serán cruciales para abastecer los materiales necesarios para la construcción de infraestructura resiliente mientras los eventos climáticos extremos se van normalizando.

Además, Unacem también aspira a ser pionera en la industria y a reducir su huella de carbono empleando combustibles alternativos.

BNamericas conversa con el CEO de Unacem, Pedro Lerner, en el marco del evento CEO Summit de la conferencia de APEC acerca de la producción de cemento, hormigón y energía, además de las perspectivas de crecimiento para el próximo año.

BNamericas: ¿Por qué Unacem decidió participar como socio y panelista en la CEO Summit de APEC?

Lerner: Hay varios motivos. Primero, porque Perú es anfitrión y creo que hay que impulsar la marca del país a nivel internacional. Segundo, porque nosotros operamos en cinco países y los cinco dan a la cuenca del Pacífico —Perú, Chile, Ecuador, Colombia y Estados Unidos—. Y tercero, porque son parte de APEC.

Por último, haber participado en el panel de sostenibilidad en un contexto de cambio climático es importante para la industria en que operamos. El cemento, el concreto y la energía eléctrica son sectores que tendrán un rol relevante en la mitigación y adaptación al cambio climático.

BNamericas: ¿Por qué mitigación y adaptación? 

Lerner: Mitigación porque es una industria intensiva en emisiones de carbono. Desde el lado de la adaptación, porque el cemento es esencial para la construcción de infraestructuras resilientes que permitan soportar eventos del cambio climático cada vez más extremos. Se habla mucho de la elevación de nivel de los océanos, lo que se traduce en diques, carreteras, canales, e infraestructuras capaces de soportar diversos desastres naturales.

[El concreto y el cemento] son materiales resilientes, baratos y, por el momento, no tienen sustituto de gran escala. Por lo tanto, cumplen un rol fundamental dentro de las estrategias de adaptación al cambio climático.

BNamericas: ¿Qué estrategias pretenden implementar para reducir su huella de carbono?

Lerner: Si hablamos de energía específicamente, una es el uso de combustibles alternativos. Los procesos de fabricación de cemento necesitan una gran cantidad de calor y, para obtenerlo, se usan combustibles fósiles como carbón, petróleo o gas natural.

En esa línea, la tecnología en cemento está avanzando para quemar fuentes de calor menos intensivas en carbono, como biomasa o combustibles derivados de residuos. En el caso de nuestras operaciones en Ecuador, hemos logrado la sustitución de hasta el 60% de los combustibles fósiles en uno de los hornos, mientras que en EE.UU. estamos sustituyendo una parte de los combustibles fósiles con derivados de cáscaras de pistacho.

BNamericas: ¿Hay potencial para combustibles derivados de residuos?

Lerner: Existe en general un potencial muy grande para el procesamiento de basura. En Europa se diseñó toda una política de reciclaje para eliminar la necesidad de rellenos sanitarios. Aquello que ya no se puede reutilizar y que, en teoría, iría a los rellenos sanitarios y botaderos, se puede procesar en los hornos de cemento.

Está el potencial de ser un aliado importante en la solución de un problema sanitario, pero es crucial que los marcos regulatorios permitan que industrias como la nuestra puedan entrar al negocio de la basura como aliados.

BNamericas: ¿Qué tipo de iniciativas renovables han implementado en Perú?

Lerner: En Perú hemos avanzado desde el lado de la electricidad. Nuestra central hidroeléctrica El Platanal, que opera dentro del sistema interconectado nacional, abastece de energía a todas nuestras operaciones industriales. Diría que somos de las pocas cementeras en el mundo que se abastece de energía hidroeléctrica 100% renovable.

Celepsa, empresa del grupo que se encarga de la hidroeléctrica, está desarrollando todo un portafolio de proyectos renovables solares y eólicos para poder crecer en el lado de la generación eléctrica renovable. Ese es nuestro foco.

BNamericas: ¿En qué etapa se encuentra?

Hoy estamos en la fase de estudio de proyectos de energía renovable. Probablemente, entre el 2027 y 2030 veremos al grupo Unacem operando centrales solares y eólicas.

BNamericas: ¿Cuál es su evaluación del rubro de la construcción en 2024?

Lerner: En Perú, el rubro de construcción no ha crecido, por lo menos en despachos de cemento, frente a 2023; pero sí ha habido ciertos cambios.

En el primer semestre de 2024 se notó una contracción del sector autoconstrucción, pero fue compensado por un incremento en el avance de grandes obras de infraestructura. En la segunda mitad, sin embargo, se registró un repunte de la primera categoría, lo que está haciendo que el 2024 sea parecido al 2023.

BNamericas: ¿Y para 2025?

Lerner: Considerando que será un año preelectoral, estamos siendo cautos con nuestras proyecciones. Creemos que al menos en Perú, a nivel de volúmenes, se estará en línea con el 2024 o habrá un ligero crecimiento.

A nivel de grupo, considerando todas las regiones donde operamos, proyectamos un crecimiento un poco mayor.

BNamericas: El año pasado cerraron la compra de una cementera en EE.UU. por más de US$300 millones. ¿Cómo avanza esta operación?

Lerner: Estamos consolidándola. A diciembre de 2022, en EE.UU. teníamos una operación de 700.000t cortas de cemento [por año], y hoy tenemos 2,1 millones de toneladas. Estamos desarrollando toda la comercialización de la adquisición que hicimos en el estado de California.

En general, los drivers de crecimiento para el Grupo Unacem en 2025 serán nuestras operaciones en EE.UU. y nuestro negocio de energía eléctrica.

BNamericas: ¿Y cómo ven el mercado en el caso de Chile?

Lerner: Vemos que ha levantado la inversión en infraestructura, pero no la construcción de nuevas viviendas. Esto se nota en los permisos para nuevas viviendas; que no se están otorgando.

Asimismo, el sector constructor chileno está enfrentando presión por un tipo de cambio elevado y eso es desafiante, porque alguno de los materiales para producir cemento —las importaciones de clínker— están en dólares. Esto último está presionando los márgenes de los operadores de cemento y hormigón.