Una prueba de liderazgo: ¿logrará el presidente de Ecuador la reelección?

Desde que asumió la presidencia de Ecuador en noviembre, Daniel Noboa ha debido enfrentar una serie de problemas, como la violencia generada por la penetración del narcotráfico y el crimen organizado, una crisis económica heredada y una creciente oposición política en la Asamblea Nacional.

De cara a los próximos comicios presidenciales de Ecuador, que se celebrarán el 2 de febrero de 2025, las posibilidades de Noboa de ser reelegido dependerían de cómo maneje las crisis energética y de seguridad, así como los problemas económicos. Y no será una tarea fácil en un país escaso de recursos fiscales, elevadas tasas de desempleo y subempleo y convulsos problemas políticos y de corrupción.

El mandatario ya adoptó dos medidas impopulares en su corto mandato: el incremento de tres puntos en el impuesto al valor agregado y el establecimiento de un alza mensual en el precio de las gasolinas, lo que puede restarle las preferencias entre los ecuatorianos. Sin embargo, tiene a su favor un debilitamiento de grupos sociales y sindicales debido a desavenencias internas, a lo que se suma la división dentro del movimiento indígena representado en la Conaie, los que tradicionalmente se han opuesto a ese tipo de medidas.

BNamericas conversa con Cristian Carpio, analista sénior de la consultora de riesgo político Prófitas, sobre los desafíos que afronta Noboa, los temas que pueden influir en el electorado y la estrategia del joven presidente para presentarse a las elecciones.

BNamericas: ¿Cómo pueden afectar los problemas energéticos y políticos a los planes del presidente Noboa para presentarse con éxito a las elecciones de febrero?

Carpio: Todo dependerá de la certeza en las acciones. Hay que considerar cómo se manejan y qué resultados se tienen en cuatro aspectos: la crisis energética, la crisis de seguridad, los problemas económicos y los posibles conflictos de interés entre los miembros del Gabinete y sus empresas.

La crisis energética es un problema estructural complicado y tiene un impacto más significativo que otras áreas porque afecta en el día: al sector productivo, al comerciante, a las personas en general. Si los apagones regresan, eso va a debilitar fuertemente al presidente de cara a las nuevas elecciones. 

En el tema económico, un aspecto fundamental es el relativo al empleo, que va de la mano de la producción petrolera, de los ingresos que obtenga el país. Y si bien logró recientemente un desembolso importante del FMI, que le está dando algo de oxígeno económico, no es suficiente.

El aumento del precio de la gasolina puede generar insatisfacción, no al mismo nivel de las protestas de 2019 o 2022, pero sí un desgaste, pese a que el gobierno hizo un buen manejo del tema porque logró un mecanismo que satisfizo principalmente a grupos del sector de transportes, con la compensación económica que recibirán.

Al no haber subido el diésel no debería haber un efecto inflacionario, pero es previsible que se dé especulación con varios productos.

BNamericas: ¿A qué conflictos de intereses se refiere?

Carpio: A las conexiones del presidente con grupos empresariales, por ejemplo, su cercanía con el grupo Nobis y sus propias empresas.

Nota del editor: Nobis es una de las compañías de inversiones más importantes de Ecuador. Fue fundada y es presidida por Isabel Noboa, tía del presidente.

Se ha hablado de que 52 funcionarios tienen acciones en distintas empresas, y a eso se une el caso del proyecto inmobiliario Olón, que desgastó de forma importante al gobierno.

Nota del editor: el principal accionista de Olón es Lavinia Valbonesi, esposa de Noboa. El proyecto se paralizó tras denuncias de impactos ambientales por implicar la tala de manglar en un área protegida.

Todos estos temas pueden jugar en contra de Noboa.

Al ser un gobierno que viene del sector empresarial, los impactos negativos pueden ser más fuertes, pues uno de los lemas del gobierno ha sido la lucha contra la corrupción, sobre todo para capturar el voto anticorreísta [de quienes se oponen a candidatos del expresidente Rafael Correa].

BNamericas: ¿Hay otros temas que pueden influir en los resultados de las elecciones?

Carpio: Sí. Hay que tener en cuenta que un tema clave en el escenario político serán las investigaciones sobre los temas de corrupción y narcotráfico en que está avanzando la Fiscalía. 

Aún hay mucha tela por cortar en casos como Metástasis; también habrá que ver si en algún momento sale a relucir la información del teléfono celular del exvicepresidente Jorge Glas, entre otros temas.

Igualmente, habrá que ver a quién designan el correísmo y las otras fuerzas políticas como candidatos.

BNamericas: Cuando faltan ocho meses para las elecciones, ¿es fuerte el desgaste del gobierno?

Carpio: Si bien es cierto que hay un desgaste del presidente, hay que tomar en cuenta que la oposición también se ha desgastado. Adicionalmente, hay una crisis de liderazgo en la oposición, incluido el correísmo, que tiene sus propios problemas, y esto beneficia al gobierno de Noboa.

BNamericas: ¿La oposición de la Asamblea Nacional podría ser un factor determinante para el gobierno?

Carpio: Es importante tener en cuenta que, al parecer, el gobierno está buscando enfilar sus ataques a la Asamblea y posicionarla como enemigo único. La Asamblea normalmente tiende a ser el organismo que más se desgasta políticamente hablando, que más insatisfacción genera, por eso el gobierno busca presentarlo como enemigo único. 

Las tres fuerzas más importantes de la oposición [liderada por el movimiento de Correa] se han juntado y eso le da un capital político al gobierno: el voto anticorreísta.

En las últimas semanas, el gobierno ha enfilado, principalmente, contra del correísmo, lo cual es una estrategia porque Noboa llegó a la presidencia con una votación bastante blanda, como el outsider, por una parte con el voto anticorreísta, pero también otros votos de centro, de centro-izquierda y de jóvenes. Pero la mayoría de ese electorado no es un voto fiel al gobierno, es un voto blando.

BNamericas: ¿El voto anticorreísta será suficiente para Noboa en su afán de ser reelegido?

Carpio: Está buscando ese voto para tener un piso más alto, es decir, partir con un electorado más fuerte, aunque el anticorreísmo duro se ubica entre el 15% y 20% de los votantes. A partir del voto anticorreísta busca capturar el voto blando, que le permita avanzar a la segunda vuelta en las elecciones presidenciales. 

Sin embargo, la oposición tiene también la capacidad de desgastar políticamente al gobierno. La actual asamblea nacional es mucho más activa, va a trabajar en temas de fiscalización a los funcionarios del gobierno, al propio presidente, y va a enfilarse a una pugna política para desgastarlo.

Noboa puede trabajar además en desgastar a la oposición y su efectividad va a depender de los potenciales liderazgos que surjan. El gobierno busca posicionar los mensajes de la vieja política versus la nueva política; los políticos antiguos versus los políticos nuevos; la nueva política versus la partidocracia.  

Sin duda, este es un juego en donde todos se desgastan, las fuerzas políticas entran débiles y podrían generar un espacio para un outsider, aunque no se ve quién podría ser.