Vestas navega con viento a favor para aprovechar la energía verde en A. Latina

El CEO de Vestas en América Latina, Eduardo Ricotta, conversó con BNamericas durante el evento Brazil WindPower 2024 sobre las operaciones del fabricante danés de turbinas eólicas y las perspectivas del mercado en la región.

El ejecutivo destacó que el foco de Vestas está en aumentar la competitividad de los productos a través de inversiones en sus instalaciones y cadena de suministro en Brasil y abordó los desafíos de la energía eólica de Brasil, la reciente recuperación del mercado y la necesidad de un marco regulatorio para apoyar los proyectos eólicos marinos.

Asimismo identificó mercados clave en la región, como México, Chile y Argentina, donde la demanda de energía renovable está creciendo gracias a factores como la expansión de centros de datos y políticas gubernamentales favorables, al tiempo que subrayó los esfuerzos de sostenibilidad de Vestas, que apuntan a llegar a cero emisiones netas para 2030.

BNamericas: ¿Cuál es el estado de las operaciones de Vestas en América Latina?

Ricotta: Atendemos a todos los países de América Latina, desde México hasta Patagonia. Trabajo en nuestra sede regional en São Paulo y tenemos una fábrica en el estado brasileño de Ceará.

Invertiremos 130 millones de reales [US$23 millones] tanto en nuestras propias instalaciones como en nuestros proveedores para aumentar la competitividad de nuestros productos. Estos recursos nos permitirán fabricar dos tipos de turbinas en el país.

BNamericas: ¿En qué países de la región cree Vestas que hay mayores oportunidades de negocio?

Ricotta: En América Latina tenemos una mayor presencia en ciertos países, entre ellos, México, Colombia, Perú, Chile, Argentina y Brasil. Estos son nuestros mercados más importantes, ya que representan el 95% de nuestro negocio en la región, y desde estos países atendemos a otros.

Entre ellos, creo que México será un mercado especialmente prometedor en los próximos años, ante una demanda deprimida de 10GW debido a la falta de proyectos disponibles. Por ejemplo, las empresas de centros de datos no pueden seguir adelante con proyectos en México porque no hay energía renovable disponible. Por eso confiamos en la expansión del mercado mexicano.

En Colombia, hay un retroceso temporal debido a la falta de infraestructura de transmisión, mientras que la complejidad de obtener permisos para proyectos ha sido un desafío importante para nuestros clientes.

Perú se encuentra en pañales en términos de proyectos de energía renovable, pero creemos que tiene potencial debido a su industria minera, que podría impulsar la demanda de energía renovable. Dicho esto, entendemos que no es un mercado enorme.

Chile está implementando políticas orientadas a que el 95% de su energía provenga de fuentes renovables para el año 2033. Este entorno favorable en materia de políticas hace de Chile un mercado fuerte para nosotros.

Argentina está mostrando una mejora significativa. Hemos tenido una gran presencia allí, pero hacer negocios es ahora más fácil gracias a reducciones impositivas y una mayor apertura económica. Antes enfrentábamos grandes problemas en la importación de materiales, pero estamos viendo mejoras en estos procedimientos.

En Brasil, después de casi 18 meses de proyectos estancados debido a problemas con los precios de la energía, hay cierta recuperación entre nuestros clientes.

BNamericas: ¿Qué ha pasado en el mercado mexicano?

Ricotta: Este año firmamos un acuerdo de venta para un proyecto de 320MW con Sempra en México.

El reto en este país es que los proyectos energéticos están en gran medida controlados por la estatal CFE, pero esperamos cambios en ese sentido.

La presidenta Claudia Sheinbaum ha indicado que se planea revisar el modelo actual, introduciendo una combinación de participación público-privada, en que el 46% de los proyectos energéticos sean liderados por privados. Por eso anticipamos un crecimiento significativo en el mercado.

BNamericas: En Argentina, el gobierno anunció cambios hace poco en la estructura de la autoridad fiscal. ¿Cómo influye eso en las perspectivas de negocios en ese país?

Ricotta: No he revisado los detalles de la medida, pero en Argentina estamos presenciando un cambio rápido y sustancial, con nuevos anuncios casi a diario.

En general, creo que Argentina está mostrando un deseo de mejorar el ambiente de negocios, y las perspectivas generales son positivas. Por supuesto, debemos ser cautelosos ante cualquier cambio repentino y determinar cómo podría afectar a nuestros clientes, pero el aumento de los precios de la energía y los nuevos proyectos deberían ayudar a estabilizar el mercado.

BNamericas: ¿Cuál es la situación del sector eólico brasileño, el cual atraviesa una crisis?

Ricotta: La matriz energética de Brasil todavía depende en gran medida de la energía hidroeléctrica y, después de las importantes lluvias de 2022 y 2023 que elevaron los niveles de los embalses, los precios de la energía cayeron a niveles que rara vez he visto.

Además, las distorsiones causadas por el exceso de subsidios a la generación distribuida contribuyeron a demorar los proyectos eólicos. Estos factores han incidido en la cadena de suministro, que tardó más de 20 años en desarrollarse.

Sin embargo, ahora hay señales de recuperación dado el notable aumento de los precios de la energía en las últimas semanas.

BNamericas: Debido a la crisis del sector eólico, muchas empresas redujeron drásticamente sus actividades y despidieron a empleados. ¿Podrían los cuellos de botella del pasado volver a afectar al segmento en momemtnos en que aumentan los pedidos?

Ricotta: Como ya he dicho, se necesitaron más de 20 años para establecer la cadena de suministro en Brasil. La crisis provocó despidos y, aunque estamos viendo una recuperación, llevará tiempo volver a la normalidad. Esto es algo que nos preocupa. El ritmo de la recuperación dependerá de la rapidez con la que se reanuden los proyectos nuevos.

BNamericas: ¿Cuáles son los principales impulsores del crecimiento de la energía eólica en el mediano y largo plazo?

Ricotta: En primer lugar, cabe recordar que la demanda de energía crece entre un 5% y un 7% anualmente.

En segundo lugar, los centros de datos son un área de crecimiento importante. Se proyecta que, a nivel mundial, la cantidad de centros de datos se disparará en 160% para 2030, y Brasil está en una excelente posición, ya que ofrece energía eléctrica a precios razonables, agua y generación solar y eólica. Por esto, los centros de datos son una oportunidad crucial para los proyectos de energía eólica.

Otro sector en crecimiento es el gas verde, vinculado a la producción de hidrógeno verde. Brasil, Argentina y Chile están en una posición privilegiada debido a sus fuertes vientos, lo que hace que la energía eólica sea muy competitiva.

Si bien los proyectos de hidrógeno verde aún enfrentan dificultades de competitividad por sus costos, espero que, al igual que la energía eólica y solar, se vuelvan viables con el tiempo.

Por último, la propia transición energética es un importante motor de la expansión del sector eólico.

BNamericas: ¿Cree que los proyectos eólicos marinos están ganando terreno en Brasil?

Ricotta: La energía eólica terrestre y marina son complementarias.

En regiones con disponibilidad limitada de terrenos, como Japón y el Reino Unido, los proyectos eólicos marinos tienden a avanzar más rápido. Sin embargo, creo que tardarán más en desarrollarse en Brasil, aunque el país ofrece excelentes condiciones para ellos. Se necesita un marco regulatorio para los proyectos eólicos marinos, ya que suelen tardar unos 10 años en desarrollarse.

La energía eólica marina tiene la ventaja de estar cerca de los consumidores de energía de la costa.

Reconozco que el marco regulatorio de Brasil para la energía eólica marina es complejo e implica a múltiples sectores gubernamentales y al Congreso, pero probablemente sea mejor tomarse el tiempo y crear un marco sólido en lugar de apresurarse a adoptar uno que tenga distorsiones.

BNamericas: ¿Hay algo más que le gustaría agregar?

Ricotta: Vestas se ha centrado en la sostenibilidad. Nos enfrentamos al gran reto de lograr cero emisiones netas para 2030, dentro de los alcances 1 y 2, a lo que se suma el gran reto de lograr cero emisiones netas con nuestros proveedores, dentro del Alcance 3.

Como parte de estos esfuerzos, recientemente nos asociamos con Banco Santander Brasil para ofrecer una línea de crédito de 1.000 millones a 2.500 millones de reales. Esta iniciativa permite que los proveedores que cuentan con certificación independiente en prácticas ESG se beneficien con un descuento de hasta el 50 % en las tasas de interés mensuales.