Bogotá intentaría arrebatar contrato de planta a BAS

Con menos de un tercio del período de concesión transcurrido, el dinero es la única razón por la cual la capital colombiana Bogotá está intentando arrebatar la propiedad de la planta de aguas servidas Salitre de manos de la concesionaria Bogotana de Aguas y Saneamiento (BAS), dijo a BNamericas un funcionario de la empresa. El funcionario señaló que no existían problemas contractuales, sin embargo, que el concejo municipal piensa que desde un punto de vista financiero sería más interesante comprar la planta y tener a BAS como operador, en lugar de tenerlo como propietario-operador. BAS, filial de la francesa Suez, una de las mayores sanitarias del mundo, se adjudicó una concesión por un contrato de construcción a tres años y de operación a 27 años en 1994 por la planta de US$100mn. La planta comenzó a operar el 2000 y presta servicios a 2 millones de habitantes. Aún se debe construir una segunda planta según los planes de la capital de sanear el río Bogotá. Aunque BAS no ha realizado declaraciones oficiales, es posible que no se oponga a la idea dependiendo de cuánto pague el municipio por la propiedad y los términos de la oferta para mantener a la firma como operador de la planta. El diario local El Tiempo informó anteriormente que el municipio pretendía que la concesionaria redujera los costos de la planta de US$33mn/a a entre US$2-4mn/a, aunque BAS propuso entre 9mn y US$10mn/a y la compra de la planta por parte de la ciudad conservando a la firma como operador. El concejo municipal solicitó una asignación presupuestaria adicional para pagar 230.000mn de pesos (US$80,3mn) estimados para liquidar el contrato.