Auguran gran papel para condensadores síncronos en descarbonización de red chilena

Los condensadores síncronos podrían convertirse en un “actor relevante” en Chile, según información a la que accedió BNamericas.

Al proporcionar potencia de cortocircuito, los sistemas ajustan las condiciones de la red eléctrica para mitigar la variabilidad de la producción de las plantas de energía renovable no convencional.

Esto se considera vital en un momento en que Chile se está alejando de la generación termoeléctrica —que proporciona niveles de energía de cortocircuito proporcionalmente más altos que la generación de energías renovables— y adoptando cada vez más las fuentes limpias como la generación eólica y solar.

En términos de estabilidad de la red, los condensadores síncronos y los sistemas de almacenamiento en baterías se consideran soluciones complementarias.

"La generación no síncrona, como por ejemplo los sistemas fotovoltaicos, los sistemas eólicos o bien proyectos [de transmisión] HVDC no podrán contribuir significativamente a la potencia de cortocircuito disponible", señaló Ángela Castillo (en la foto), directora de desarrollo de negocios, industrias de energía y procesos de la firma de ingeniería estadounidense Black & Veatch para América Latina. “De este modo, los condensadores síncronos podrían convertirse en un actor relevante en el aumento de la potencia de cortocircuito del sistema dominado por la generación renovable”.

Sin embargo, existen dificultades en la región, principalmente la escasez de proveedores expertos que puedan garantizar la correcta integración y puesta en marcha, advirtió Castillo, que añadió que “no hay cabida para los errores”.

“La futura red eléctrica regional deberá ser capaz de soportar dinámicas cada vez más complejas en la transición, pasando desde el uso de recursos síncronos convencionales a recursos basados en electrónica de potencia o inversores”, sostuvo.

En los próximos años será necesario instalar condensadores síncronos para garantizar el funcionamiento óptimo de Kimal-Lo Aguirre, la línea de transmisión HVDC de norte a sur que tendrá un costo de US$1.500 millones y que debiera entrar en servicio hacia 2030.

Tras un fallo del panel de expertos de Chile, organismo autónomo encargado de resolver disputas en el sector eléctrico, un proyecto de condensador síncrono asociado de US$285 millones fue eliminado del plan de transmisión 2022 de la Comisión Nacional de Energía (CNE). La capacidad necesaria ahora podrá contratarse mediante licitaciones de servicios auxiliares, la primera de las cuales ya está en marcha.

El proyecto de condensador síncrono, según lo establecido en el plan de transmisión 2022, es de al menos 4.600MVA. De ser completamente exitosa, la licitación de servicios auxiliares debería entregar al menos 6.818MW de potencia de cortocircuito.

Castillo señaló que los condensadores eran vitales para el proyecto de la línea eléctrica y que, incluso si se instalaran antes de que se completara el enlace (reclamo presentado por una asociación que buscaba la exclusión del proyecto del plan), aún se tendría un impacto positivo en la red.

Los sistemas por sí solos " mejoran los atributos de seguridad y confiabilidad " y, en el caso de que se instalen antes, "sería un error sostener que los condensadores síncronos no van a estar aportando beneficios", dijo.

Castillo pidió una planificación y análisis en profundidad y debates abiertos con todas las partes interesadas.

Chile está trabajando para retirar 5,5GW de capacidad a carbón para 2040 y tener un sistema de energía eléctrica libre de emisiones para 2050. También está prevista una licitación de almacenamiento, diseñada principalmente para combatir los vertimientos de energía. Un proyecto de ley que abriría la puerta a esta subasta se encuentra en el Congreso.