Bolivia obtiene fondos alemanes para proyectos de agua

Bolivia, que lucha contra la severa sequía que ha afectado las regiones altiplánicas en los últimos años, obtuvo financiamiento alemán para proyectos de agua.

Los gobiernos de Alemania y Bolivia firmaron acuerdos de cooperación que facilitarán 20,4mn de euros (US$23,2mn) en cooperación técnica de la agencia estatal KfW, además de 26,5mn de euros en préstamos para proyectos de agua potable y alcantarillado, anunció el ministro de Relaciones Exteriores, Diego Pary.

Los acuerdos incluyen proyectos de agua potable y alcantarillado en la ciudad de Sucre y programas de reforestación. Ambos gobiernos estudiarán nuevos acuerdos durante las conversaciones programadas para mayo en Berlín, según Pary.

"Valoramos enormemente el compromiso y la colaboración constante del Gobierno alemán", comentó Pary. "No solamente venimos trabajando en temas de cooperación técnica y financiera, sino también en temas comerciales, en tema financieros en temas de inversiones".

Alemania proporcionará 1mn de euros adicional en financiamiento para iniciativas sociales innovadoras, indicó el embajador del país europeo, Matthias Son.

En otras noticias sobre infraestructura hídrica, el gobierno terminó los trabajos de un programa de conservación de 4,5mn de bolivianos (US$630.000) en la cuenca del río Quinamara en el departamento de Potosí, parte del plan nacional de cuencas hidrográficas.

El programa contempla la construcción de 14 sistemas de riego, terrazas, diques y reforestación de un área de 21ha que beneficiará a 300 familias ante las inclemencias del cambio climático, anunció el Ministerio de Medio Ambiente y Agua en un comunicado.

El gobierno del presidente Evo Morales ha invertido 13.669mn de bolivianos en el sector hídrico desde que asumió el cargo en 2006, cifra que triplica con creces la cantidad gastada entre 1997 y 2005, según la cartera.

Morales, quien declaró emergencia nacional y despidió a sus principales funcionarios del agua por no advertir al gobierno sobre la falta de suministro a fines de 2016, acelera los proyectos pendientes de agua potable y alcantarillado después de que la peor sequía del país en medio siglo obligara a la empresa estatal Epsas a restringir el suministro en La Paz, ciudad de 800.000 habitantes.

La región andina oriental en los últimos dos años ha sufrido los efectos del calentamiento global y el fenómeno de La Niña, donde las temperaturas oceánicas más frías causan sequías en las tierras más altas.