Brexit: análisis e impacto para Chile y América Latina

Por Gerardo Maldonado, gerente, prospectiva estratégica, Ripp Consulting, Chile

A pesar de los intrincados vínculos históricos y culturales entre el Reino Unido y América Latina, la presencia de Reino Unido en el comercio de América Latina se ha ido diluyendo como lo prolongado de las visitas de su secretario de Relaciones Exteriores a varios de nuestros países: 50 años para que un secretario de Relaciones Exteriores visitara Perú, 25 años para visitar de nuevo Argentina e igual número de años para Chile. Quizás una de las razones esgrimidas por los partidarios del brexit para esta ausencia sea que el Reino Unido se volvió más eurocéntrico y menos instintivamente global que antes, perdiendo simplemente el foco en América Latina.

Si queremos ver el impacto del brexit (cualquiera sea la decisión que adopte el Parlamento inglés) en América Latina, es necesario analizarlo desde la perspectiva individual de cada país.

CHILE

En las últimas décadas, Chile ha sido una de las economías de más rápido crecimiento en América Latina. Esto le ha permitido una importante reducción de la pobreza y actualmente exhibe los menores porcentajes de este flagelo. En el país más estable de América Latina, el manejo macroeconómico y fiscal responsable proporciona una base sólida para lograr un crecimiento estable para los próximos años y una imagen país de alto valor para los inversionistas extranjeros.

La apertura comercial le ha propiciado un crecimiento sólido y le ha permitido firmar tratados de libre comercio con prácticamente todas las regiones. Esta vasta red de tratados ha dado lugar a verdaderas cadenas de cooperación y producción internacional. Así, despliega una multiplicidad de productos y servicios atractivos por su calidad, variedad y valor agregado.

De esta manera, Chile cuenta con 26 tratados de libre comercio con 64 naciones que comprenden el 86% del PIB mundial y mercados que representan el 63% de la población mundial (4.676 millones de personas). Chile posee la red de tratados de libre comercio con mayor acceso al PIB mundial (OCDE).

En relación con el brexit ¿qué impacto, podría tener una decisión que conlleve a un proceso político prolongado en el Reino Unido sobre las economía de Chile y de America Latina?

Si queremos ver el impacto del brexit en América Latina, es necesario analizarlo desde la perspectiva o realidad económica, cultural, social, política de cada país.

Para el caso específico de Chile, los principales representantes a nivel político, industrial y económico siguen muy de cerca la decisión que adoptará finalmente el Parlamento inglés sobre el brexit. Su embajador, David Gallagher, sigue muy atento los pormenores de este importante acontecimiento. La Dirección de Asuntos Económicos Bilaterales de Direcon, organismo perteneciente al Ministerio de Relaciones Exteriores, está estudiando los lineamientos generales del plan de acción del Gobierno de Chile ante el nuevo escenario cualquiera que este sea.

En cuanto al impacto directo, es importante recordar que las exportaciones de Chile al Reino Unido no implican más allá del 0,8 al 1% de las ventas totales. El 95% de las exportaciones de Chile se dirigen a los países con tratados de libre comercio: China (27%), EE.UU. (14%), Japón (9%), Corea del Sur (6%), Brasil (5%), India (3%), Perú (3%). Esto no quiere decir que no haya preocupación, pues hay ciertas industrias claves como el vino y las frutas que sí tienen clientes importantes en el Reino Unido que podrían verse afectados.

Alrededor del 90,3% de los productos chilenos que ingresan al mercado del Reino Unido lo hacen sin aranceles (acuerdo de asociación entre el país y la Unión Europea). Los principales productos exportados al Reino Unido son paltas hass, arándanos, vinos (con denominación de origen) y uvas (variedad Crimson Seedless).

Los principales productos importados desde el Reino Unido son automóviles, aceites crudos de petróleo, whisky, medicamentos, reactivos de laboratorio, etcétera. Estos productos importados en Chile no pagan arancel, por lo tanto, dependiendo de la decisión que se tome sobre el brexit, esto tiene efectos en los precios de Chile.

Sea como sea, en cualquiera de los escenarios complejos del brexit, para tener mayor claridad sobre el futuro de las decisiones, los expertos aseguran una media de 22 semanas para dilucidar cualquiera de las vías a tomar, incrementando la incertidumbre a niveles jamás vistos.

La Dirección de Asuntos Económicos Bilaterales de Direcon, desde hace ya cierto tiempo, viene sosteniendo reuniones con representantes del Reino Unido para tratar sobre el brexit. La preocupación es lo prolongado que pueda resultar la decisión que se tome, pues los acuerdos logrados entre ambas naciones (dadas por el marco de la Unión Europea) quedarían sin efecto y se normarían por el libre comercio. También es latente la preocupación en Chile del avance o retroceso que puedan estar teniendo las conversaciones bilaterales de naciones como Argentina, Perú y Brasil con el Reino Unido, ya que estos son competidores directos en mercados importantes o estratégicos para Chile.

¿Hay un resultado —por ejemplo un brexit sin acuerdo— que podría ser particularmente beneficioso para Chile y American Latina?

Las estrategias seguidas por la Dirección de Asuntos Económicos Bilaterales de Direcon, sea cual sea el desenlace del brexit, son de mantener o mejorar las relaciones comerciales con el Reino Unido. En este sentido, Chile tiene bastante adelantadas las conversaciones con las autoridades británicas para seguir llevando a cabo las consultas para lograr que las relaciones comerciales, independientemente del resultado del brexit, sean las mejores para ambos países.

Lo bueno en este tipo de circunstancia para Chile son las excelentes relaciones culturales e históricas, así como comerciales que a lo largo de los tiempos ha mantenido con el Reino Unido. Tal como es percibido Chile en el contexto internacional, le proporciona un valor agregado al ser un país modelo en América Latina en cuanto a equilibrio fiscal y financiero. El desarrollo de Chile en los tratados de libre comercio lo hace menos vulnerable frente a diversas crisis, dotándolo de un know-how en las relaciones comerciales que le permite anticiparse a la incertidumbre y tomar las mejores decisiones en materia comercial.

Mientras no se ejecute la salida del Reino Unido de la Unión Europea, la relación comercial seguirá bajo los términos contemplados en el pilar comercial del Acuerdo de Asociación con el Mercado Común. Si efectivamente hay un brexit, lo beneficioso para Chile son los avances que se han obtenido luego de más de cuatro encuentros tanto en Santiago como en Londres de equipos multidisciplinarios para tratar el tema del brexit con mayor profundidad.

Para el resto de América Latina, los beneficios de un brexit si este se concreta estarán dados por los diferentes adelantos que cada país ha logrado con las autoridades del Reino Unido, esto —reitero— dependiendo de las condiciones económicas, culturales, sociales y políticas de los diferentes países.

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