Crece exposición a denominado riesgo cibernético silencioso

El denominado problema de exposición o riesgo cibernético silencioso –potenciales pérdidas relacionadas con el ciberespacio debido a la cobertura de pólizas de seguro que no están diseñadas específicamente para cubrir el riesgo cibernético– no es un problema nuevo para las aseguradoras y los asegurados.

Pero con la aceleración de la transformación digital y la mayor exposición de diferentes industrias a ataques y filtraciones de datos, las líneas con respecto a exactamente qué coberturas de seguros se han vuelto aún más borrosas.

“Es por eso que el nivel de comprensión del riesgo hoy tiene que ser incluso más alto que antes. En general, el mercado ha estado preocupado por buscar limitar o controlar el riesgo para que los problemas de ciberseguridad puedan relacionarse con las políticas de ciberseguridad”, dijo a BNamericas Nuno Antunes, director general para la región iberoamericana de Allianz Global Corporate & Specialty (AGCS).

"La sostenibilidad de las empresas y el precio del seguro en sí depende de esto", señaló Nunes (en la foto), quien asumió el cargo en julio de 2020.

En un informe de 2017, Willis Tower Watson habló sobre los riesgos cibernéticos silenciosos.

Como ejemplos de exposición cibernética silenciosa, la consultora mencionó un ataque cibernético al sistema de control de una planta industrial que provocó la explosión de una caldera, lo que generó importantes daños a la propiedad y la interrupción del negocio, o un malware que derivó en la falla de un ascensor y causó múltiples víctimas.

“Si bien el pago de una póliza dependerá de los detalles de la redacción y los eventos individuales, tales ejemplos ilustran cómo los eventos cibernéticos silenciosos pueden aumentar los índices de pérdidas en las pólizas que no están específicamente diseñadas para cubrir el riesgo cibernético”, escribió Willis Tower Watson en ese momento.

POLÍTICAS CIBERNÉTICAS

AGCS ha experimentado un aumento significativo en la demanda de seguros cibernéticos en Latinoamérica en los últimos años, y particularmente desde la aparición del COVID-19, a medida que más y más empresas recurren a dicha protección.

También ha habido un alza en los límites de las pólizas cibernéticas contratadas.

Al mismo tiempo, según Antunes, AGCS ha experimentado un fuerte crecimiento en los reclamos cibernéticos, aunque no dio detalles específicos sobre estos aumentos.

En este sentido, uno de los objetivos de AGCS en su operación iberoamericana es llevar el ciberproducto "lo más lejos posible", buscando ofrecer evaluaciones de riesgo para estructurar la ciberprotección con mayor precisión y sujetarse a una menor exposición, al tiempo que brinda mejor cobertura para los asegurados.

"Un ciberataque puede ocurrir que involucre a varios países y varias empresas y afectar a una gran cantidad de políticas", explicó Antunes.

Como parte de este impulso en el área cibernética, AGCS y Munich Re anunciaron este mes que se encuentran desarrollando conjuntamente una nueva solución comercial de seguro contra riesgos cibernéticos, diseñada exclusivamente para clientes de Google Cloud inscritos en el nuevo "programa de protección contra riesgos" de Google.

Inicialmente, el servicio solo estará disponible para empresas e individuos estadounidenses, pero Antunes afirma que se espera su implementación en otras geografías en una fecha posterior.

CAMBIOS

Ha habido una serie de cambios que han surgido o se han visto agravados por la pandemia y que han tenido efectos tanto positivos como negativos en el sector asegurador, y que llegaron para quedarse, manifestó Antunes.

Estos incluyen un movimiento reducido de personas en áreas urbanas, menos arrendamiento de oficinas y un incremento de la modalidad de teletrabajo, además de mayor ciberseguridad industrial.

Pero no ha sido solo la pandemia la que ha provocado estas modificaciones, ya que muchos de ellas ya llevan en marcha algún tiempo y han estado dando forma a la división de seguros corporativos de Allianz durante al menos los últimos cinco años.

En julio de 2020, AGCS impulsó una reestructuración de su modelo organizacional y de negocios que incluyó la creación de una sola unidad, que sumó sus operaciones en México y el Caribe a las de Sudamérica, Portugal y España.

“Esta estructura tiene sentido. Hay muchos valores y hábitos culturales e incluso corporativos que comparten estas áreas, y también desde el punto de vista económico, con muchas empresas, principalmente españolas, operando en la región”, argumentó Antunes.

“Latinoamérica funciona como un espacio natural de expansión”, dijo.