Efectos de sequía argentina ceden mientras motores de empleo vacilan

La actividad económica de Argentina se desacelera a medida que una tormenta perfecta continúa azotando al país.

Sin embargo, datos del instituto de estadísticas Indec muestran que el ritmo de desaceleración ha disminuido.

Las cifras revelan que en agosto la actividad registró una caída interanual de 1,6%, por debajo de las contracciones de 2,7% de julio, 6,8% de junio y 5,2% de mayo.

Una sequía ha afectado gravemente a la economía este año. Su impacto en los niveles de actividad comenzó a sentirse con fuerza en el 2S18, pero las cifras de agosto muestran un repunte, señaló la consultora local Ecolatina en un informe. En agosto, la actividad en este sector aumentó 2,2% año con año luego de cuatro meses de contracciones de dos dígitos.

La caída general de 1,6% en agosto se debió en gran medida a la desaceleración en los sectores de industria, comercio y construcción. De acuerdo con Ecolatina, esto podría haber llevado a un deterioro de los datos de empleo en agosto, citando el hecho de que estos sectores representan la mayoría de los puestos de trabajo en el país.

La compañía indicó que otros factores detrás de los problemas económicos —como la aceleración de la inflación, el choque de divisas y el alza de las tasas de interés— agravarán la recesión en los últimos cuatro meses de 2018.

Se prevé que el PIB se contraerá 2,5% este año.

La elevada inflación y las altas tasas de interés están erosionando el poder adquisitivo y disminuyendo la demanda de préstamos.