Fitch prevé “apoyo financiero incondicional” para Pemex

La agencia de calificación crediticia Fitch anticipa un “apoyo financiero incondicional” del gobierno mexicano entrante a la petrolera nacional Pemex, hoy sumida en una elevada deuda.

Pemex tiene obligaciones por más de US$100.000 millones. En los últimos años, el Estado le ha inyectado capital y ha recortado las tasas impositivas para ayudarla a financiar inversiones y pagar pasivos.

En un comunicado de prensa difundido el jueves en el que se ratifica su calificación de emisor en moneda extranjera en 'BBB-' con perspectiva estable, Fitch señaló que espera que el gobierno de la presidenta electa Claudia Sheinbaum continúe brindando apoyo financiero a Pemex.

El 1 de octubre, Sheinbaum sucederá a su mentor político y actual presidente, Andrés Manuel López Obrador.

Sheinbaum ha manifestado que su objetivo es mantener la posición dominante de Pemex en el mercado petrolero mexicano, tanto en el segmento upstream como en el downstream.

“Esto probablemente requerirá continuas transferencias federales, a menos que haya una mejoría significativa en la eficiencia operativa de la empresa o una reducción en su carga de deuda”, indicó Fitch.

La calificadora estimó que la administración de AMLO entregó a Pemex un respaldo equivalente a casi un 4% del PIB entre 2019 y 2023, “transfiriendo efectivamente pasivos del balance de Pemex al del Gobierno Federal”.

El apoyo sostenido a Pemex podría resultar en una menor recaudación de impuestos y/o una mayor carga de deuda del Gobierno Federal, agregó Fitch, lo que impactaría negativamente en las finanzas públicas.

La agencia señala que el gobierno incluyó por primera vez medidas de apoyo a Pemex en el presupuesto en 2024 y ha recalcado su compromiso con garantizar su liquidez.

“Esperamos que Pemex reciba un respaldo financiero incondicional por parte del gobierno y que continúe incluyéndose como partida en ejercicios presupuestarios posteriores”.

Para la economía mexicana, Fitch proyecta una desaceleración del PIB real a 2,0% en 2024 a partir del 3,2% de 2023, tendencia que continuaría a la baja hasta un 1,8% en 2025.

La agencia espera que una combinación de una economía estadounidense más lenta, una postura fiscal más estricta desde que la nueva administración asuma el cargo y una política monetaria restrictiva se traduzcan en una desaceleración del crecimiento el próximo año.

Fitch agregó que el nearshoring ofrecerá a México atractivas oportunidades para mejorar su participación en la cadena de suministro global y diversificar su capacidad de fabricación.