Interés propio ilustrado: Trinidad y Tobago, Venezuela y los mercados mundiales de gas

Este comunicado de la Cámara de Energía de Trinidad y Tobago se publicó usando un sistema automático de traducción.

La reciente noticia de un diálogo renovado entre el gobierno y la oposición en Venezuela y el cambio de postura diplomática de los Estados Unidos hacia las sanciones abre una posibilidad renovada para que Trinidad y Tobago importe gas natural a través de gasoductos desde Venezuela. Con un potencial significativo para procesar el gas natural exportado por gasoducto en GNL o productos petroquímicos para los mercados internacionales, Trinidad y Tobago representa la mejor oportunidad para que Venezuela monetice sus enormes reservas de gas en alta mar y detenga la quema dañina y derrochadora de gas asociado en sus campos petroleros. Esto asegurará que Venezuela pueda generar los ingresos necesarios para superar la continua crisis humanitaria del país, así como proporcionar al mundo GNL adicional, fertilizantes y combustibles bajos en carbono.

Hasta la fecha, la mayor parte de la atención de los medios internacionales se ha centrado en el papel de Venezuela como principal productor de petróleo. Pero el país también es un importante productor potencial de gas natural, con muchos yacimientos de gas de varios billones de pies cúbicos sin explotar frente a sus costas norte y este. En parte debido a la falta de inversión y la falta de acceso a tecnología y equipos, el país también es uno de los principales contribuyentes al problema de la quema de gas natural, que produce enormes volúmenes de gases de efecto invernadero sin ningún beneficio de producir energía utilizable.

El Gobierno de Trinidad y Tobago ha estado trabajando arduamente en los canales diplomáticos durante los últimos meses y años para alentar un replanteamiento de las sanciones de EE. UU. a las exportaciones de gas venezolano. Según informes de prensa, el gobierno de Trinidad y Tobago solicitó formalmente recientemente una exención del régimen de sanciones. La Cámara de Energía de Trinidad y Tobago ha apoyado plenamente este enfoque del gobierno de Trinidad y Tobago, y a menudo hemos dialogado sobre este tema con diplomáticos estadounidenses, así como con otras misiones diplomáticas y partes interesadas. También hemos mantenido un diálogo con actores del sector privado en Venezuela sobre este tema.

Exportar gas de Venezuela a Trinidad y Tobago podría ser beneficioso para muchos jugadores diferentes y diferentes países. Al igual que con las licencias de exportación de petróleo propuestas, podría ayudar a asegurar ingresos muy necesarios para fines humanitarios en Venezuela y proporcionará gas natural para los sectores petroquímicos y de GNL en Trinidad, ayudando a asegurar empleos, divisas y oportunidades comerciales continuas.

El gas venezolano procesado en Trinidad estará entonces disponible para los mercados internacionales que buscan productos, especialmente de un país confiable y seguro como Trinidad. Desde el punto de vista del cambio climático, la capacidad de procesar el gas que se está quemando actualmente y convertirlo en un uso productivo será una gran victoria, especialmente si luego desplaza la electricidad a carbón.

Dada la proximidad de muchos de los campos a Trinidad y la experiencia del país en desarrollos de gas en alta mar, estos proyectos también podrían brindar una oportunidad para la industria de servicios de Trinidad. En el pasado, muchas empresas del sector privado de Trinidad trabajaron en el sector petrolero de Venezuela y, al igual que muchas de sus contrapartes estadounidenses, también tienen deudas pendientes desde hace mucho tiempo que no se han saldado. Este es un tema que no debe olvidarse en la discusión general.

La Cámara de Energía cree que las oportunidades presentadas por la posibilidad de exportar gas por gasoducto desde Venezuela a Trinidad son demasiado importantes como para dejarlas en un segundo plano. Por lo tanto, recomendamos encarecidamente a todas las partes interesadas que trabajen asiduamente para convertir esta oportunidad, que se ha discutido durante décadas, en una realidad. Estamos listos para desempeñar el papel que sea necesario para que esto suceda.