Radiografía a la retirada del carbón en Chile

Chile está cada vez más cerca de lograr el objetivo de retirar un parque eléctrico a carbón de 5,53GW.

En uno de los últimos capítulos, el directorio del mayor actor del segmento carbonero del país por capacidad instalada, AES Gener, aprobó este mes el retiro anticipado de la unidad N°2, de 208MW, de su complejo Ventanas, en la Región de Valparaíso.

Está previsto que la unidad quede desconectada para fines de año.

En 2019, AES Gener y sus colegas generadoras Colbún, Enel y Engie llegaron a un acuerdo con el gobierno para desconectar voluntariamente sus centrales eléctricas a carbón a más tardar en 2040.

La capacidad a carbón originalmente existente, distribuida en 28 unidades generadoras, se ha ido reduciendo. Se consideran necesarios entre 15GW y 20GW de energías renovables y plantas de almacenamiento de energía, un factor que estimula el interés en las oportunidades de energía limpia de Chile, para sustituir la capacidad retirada.

Quince unidades generadoras de carbón (2,88GW) y cinco de coque de petróleo (702MW) para alrededor de 3,6GW de capacidad fueron clasificadas como operativas en julio, según datos de la comisión de energía CNE.

El mes anterior, las plantas a carbón representaron el 18,5% de los 7.033GWh generados, 35,6% menos en la comparación interanual, según la asociación de energías renovables Acera. El coque de petróleo representó el 0,5%, un alza de 100%. En contraste, las plantas renovables no convencionales dieron cuenta del 33,9% de la energía generada en junio, 34% más en la comparación interanual, y una capacidad instalada de 14,8GW, o alrededor del 42,8% del total.

El gobierno quiere acelerar esto. Su proyecto de ley de transición energética establece que el 100% de la electricidad tendrá cero emisiones para 2050. Un objetivo asociado es que el 80% de la energía provenga de energías renovables para 2030.

A nivel nacional, la capacidad instalada en junio llegó a 34,5GW, según Acera.

Paralelamente a su salida del carbón, las principales generadoras de Chile están ampliando su huella de energía renovable y formando la vanguardia en almacenamiento de energía. Se necesita inversión en almacenamiento de energía para ayudar a mitigar la intermitencia de la energía eólica y solar.

El proyecto de ley de transición energética del gobierno establece el objetivo de instalar 2GW de capacidad de almacenamiento para 2030, citando tecnologías que incluyen baterías, almacenamiento por bombeo, aire comprimido y aire líquido.

Aproximadamente el 70% de la energía consumida en Chile corresponde a combustibles fósiles importados. El sector energético, principalmente la generación con carbón, es responsable de la mayor parte de las emisiones de gases de efecto invernadero del país. Reducir la generación con carbón e impulsar la electrificación es vital para los planes de Chile de alcanzar la carbononeutralidad en 2050.

Chile representa alrededor de solo el 0,25% de las emisiones globales de gases de efecto invernadero, pero, según algunos estudios, se encuentra entre los 10 países con mayor riesgo de sufrir las consecuencias del cambio climático, según establece el plan de jubilación del carbón del país.

AES ANDES

Antes de la implementación de la iniciativa nacional, la capacidad instalada de generación a carbón en Chile era de 5,53GW, de los cuales AES Gener representaba el 54,6%.

AES Andes apunta a abandonar completamente el carbón para fines de 2025. Se están considerando varias vías para lograrlo.

"La empresa está analizando la mejor opción para cada central de carbón entre su posible retirada, venta o conversión a tecnologías sin emisiones. Si los requisitos del sistema hacen inviable la desconexión antes de finales de 2025, AES podría considerar la venta o conversión de las unidades de carbón junto con los compromisos de descarbonización", consigna una presentación ante inversionistas realizada en agosto.

UNIDADES A CARBÓN

La cartera de activos a carbón de AES Andes antes del inicio de la descarbonización comprendía  Angamos (dos unidades, de 277MW y 281MW de capacidad bruta), Cochrane (dos unidades, de 275MW de capacidad bruta cada una), Nueva Tocopilla (dos unidades, de 141MW de capacidad bruta cada una), Guacolda (cinco unidades, tres de 154MW de capacidad bruta, una de 145MW y una de 156MW) y Ventanas (cuatro unidades, de 114MW, 208MW, 267MW y 272MW de capacidad bruta).

AES Andes se deshizo de Guacolda y ya retiró la unidad No.1 de Ventanas. La compañía también vendió el 50% de su participación en Cochrane y se comprometió a retirar las unidades Angamos y Nueva Tocopilla/Norgener junto con sus tres activos restantes de Ventanas.

PROYECTOS

AES anunció proyectos de energía limpia destinados a su planta termoeléctrica Angamos, en la Región de Antofagasta. Sobre la mesa de diseño hay un plan de US$450 millones para convertir Angamos en una instalación de almacenamiento de energía en sales fundidas de 560MW con capacidad de inyección de seis horas para fines de 2026.

El otro implica la construcción, por US$10 millones, de una instalación de producción de hidrógeno verde de 2,5MW con capacidad para producir 1.000kg/d de combustible para fines de 2024. Entre los posibles compradores se incluyen empresas mineras y de logística.

La inversión en ambos proyectos aún está bajo análisis, según la presentación a los inversionistas.

ENGIE

Antes de la implementación del programa voluntario de retirada de carbón, Engie representaba el 27,2% de la capacidad instalada.

La empresa pretende eliminar gradualmente la generación a carbón para finales de 2026.

UNIDADES A CARBÓN

La cartera de activos a carbón de Engie antes del inicio de la campaña de descarbonización estaba compuesta por Mejillones (dos unidades de 162MW y 172MW de capacidad bruta), Andina (dos unidades, de 177MW y 178MW de capacidad bruta), Tocopilla (cuatro unidades, de 85MW, 86MW, 136MW y 132MW de capacidad bruta) e Infraestructura Energética Mejillones (una unidad de 377MW de capacidad bruta).

Para fines de 2024, Engie espera haber desconectado seis unidades a carbón por un total de 800MW: sus cuatro unidades de Tocopilla y sus dos unidades de Mejillones.

PROYECTOS

Para fines de 2026, el objetivo es haber convertido las tres restantes. Obras contemplan cambio de central de 375MW   Infraestructura Energética Mejillones a GNL, un proyecto que costará US$52 millones, y la conversión de sus dos unidades Andina —por un total de 350MW— para funcionar con biomasa, con un precio estimado de US$25 millones.

ENEL

El año pasado, Enel, el mayor generador de cero emisiones de Chile, se convirtió en el primer actor en desconectar todas sus unidades de carbón en el país. La empresa operaba Tarapacá (una unidad con una capacidad bruta de 158GW) y Bocamina (dos unidades en Coronel, de 130MW y 348MW de capacidad bruta) o el 11,5% de la capacidad instalada de carbón.

“Hemos cumplido con el compromiso de apagar nuestra última central a carbón en Chile, pero en paralelo estamos estudiando soluciones que permitan una transformación sostenible e innovadora de la infraestructura existente”, señaló el CEO de Enel Generación en su momento.

Coronel es un objetivo para una posible reutilización de activos, manifestó la compañía.

BNamericas contactó a un vocero de Enel que no estuvo disponible de inmediato para hacer comentarios.

COLBÚN

Del parque original de centrales a carbón de Chile, Colbún representa el 6,7%, correspondiente a su central unitaria Santa María de Coronel, en la Región del Biobío.

La compañía no ha revelado planes para la central eléctrica con una capacidad bruta de 370MW, que comenzó a operar hace aproximadamente una década.

En términos de energías renovables, la compañía ha anunciado el objetivo de instalar unos 4GW de capacidad de energías renovables antes de la próxima década.

Entre sus proyectos en cartera se encuentra el parque eólico de 360MW Los Junquillos, previsto para la Región del Biobío.