Las claves del pacto energético de La Guajira colombiana

El presidente Gustavo Petro anunció el jueves la firma de un acuerdo con el grupo indígena wayuu que debiera ser un punto de inflexión en los planes de transición energética de Colombia.

Según las autoridades, el denominado pacto por la transición energética de La Guajira tiene como objetivo dar mayor voz a las comunidades locales en la planificación de proyectos de energía renovable no convencional a gran escala.

Estos son algunos de los puntos clave del acuerdo, que suscribieron 140 autoridades indígenas, 12 empresas de desarrollo, entidades internacionales y representantes del gobierno local y nacional.

"SOCIOS PERMANENTES"

Petro dijo que su objetivo es convertir a las comunidades locales en partes interesadas, permitiéndoles participar en la toma de decisiones a lo largo de la vida de un proyecto, no solo en la etapa de consulta previa.

“Un pacto wayuu permanente –que aquí se le denomina pacto energético–, implica una asociatividad, es decir, la comunidad wayuu, las asociaciones wayuu, etcétera, deben ser socias de los proyectos”, señaló el mandatario en un discurso difundido en las redes sociales.

"Al ser socias, parte de la utilidad pasa a las comunidades y entonces, durante 10, 15 o 20 años –lo que dure–, va a tener un flujo permanente para que esas comunidades vayan resolviendo problemas, de los más agudos a los menos", agregó.

VISIÓN TRIPARTITA

La ministra de Minas y Energía, Irene Vélez, indicó que el pacto se basa en el deseo de reducir la desigualdad, y añadió que la asociación permanente con las comunidades propuesta por Petro beneficiaría por igual a los residentes locales y a los promotores de proyectos.

“Este acuerdo se ha alcanzado en el contexto de la transición energética justa para lograr la meta [de cerrar las brechas de desigualdad]”, explicó Vélez.

“Nos enfrentamos a un reto enorme, que es respetar a la gente y respetar los territorios durante la transición energética. Por eso el Gobierno quiere trabajar sobre la base de una visión tripartita, en la que las empresas, las comunidades y el gobierno formen parte de la solución”, añadió.

ECOPETROL ASUMIRÁ ROL PROTAGÓNICO

Petro expresó que espera que la estatal Ecopetrol desempeñe un papel fundamental para garantizar una armonía duradera entre las comunidades y los desarrolladores de proyectos.

"Con estos modelos que me gustaría que empezáramos a probar, quizás Ecopetrol deba dar los primeros pasos porque estos nos podrían llevar a niveles de inversión aún mayores", manifestó Petro.

“Esto podría generar utilidades para los territorios de La Guajira de más o menos US$700 millones anuales. Ecopetrol debería dar un paso alrededor de este tipo de asociatividad con las comunidades”, agregó.

LA GUAJIRA ESTRATÉGICA

Según el gobierno, La Guajira alberga actualmente 21 proyectos de generación eólica y solar, además del desarrollo de transmisión de 500kV Colectora.

Petro dijo que el departamento es un aliado estratégico en la transición baja en carbono de Colombia y que ayudaría a garantizar la seguridad energética a largo plazo del país.

“Los datos que yo tengo es que [La Guajira] tiene un potencial [de capacidad instalada] de 25GW. Colombia toda consume en un año más o menos unas 18GW. Es decir, solo la energía limpia de La Guajira, en su máximo, podría reemplazar toda la generación eléctrica de Colombia", aseveró.