Mineras brasileñas podrían beneficiarse de controles más estrictos a presas de relaves

Las autoridades brasileñas implementaron recientemente inspecciones más rigurosas de las condiciones de las presas de relaves para reducir el riesgo de nuevos desastres mineros, medida que genera dudas sobre cómo afectará a las empresas del sector.

"Este año, durante la temporada de lluvias, vemos que las autoridades están muy atentas a las condiciones de las presas de relaves y exigen esfuerzos adicionales de las empresas para evitar cualquier problema", dijo a BNamericas Valdir Farias, director ejecutivo de la consultora minera brasileña Fioito. "A corto plazo esto siempre representa mayores costos para una empresa, pero a largo plazo evita que estas gasten fortunas para remediar grandes tragedias”.

Tales tragedias ocurrieron en 2015 y 2019, con el colapso de presas en Mariana y Brumadinho, respectivamente, que dejaron unos 300 muertos y graves daños ambientales.

El año pasado, la minera local Vale y Minas Gerais acordaron una compensación de 37.700 millones de reales (US$6.920 millones) por el desastre de Brumadinho.

Las autoridades estatales y el fabricante de pélets de mineral de hierro Samarco Mineração, propiedad de Vale y BHP, están negociando un nuevo acuerdo de compensación por el desastre de Mariana que podría establecer una cifra récord a nivel mundial.

Según fuentes consultadas por BNamericas, la demanda inicial del gobierno es por una indemnización de más de 150.000 millones de reales, monto que Samarco está tratando de rebajar.

Como parte de las medidas de control más estrictas que está aplicando Minas Gerais, la fundación ambiental estatal FEAM y el Ministerio Público ordenaron la intervención de 18 relaveras del grupo minero brasileño Vale y le exigieron tomar medidas para evitar roturas.

Por otra parte, las autoridades de Minas Gerais instruyeron la semana pasada a las grandes mineras que operan en el estado a informar sobre la condición de 31 relaveras en medio de las intensas lluvias. De las presas, 29 pertenecen a Vale, una es propiedad de ArcelorMittal Brasil y otra de Minérios Nacional, división de la siderúrgica local CSN.

“Con base en los datos presentados, se constató que 18 presas presentan incidencias que deben ser atendidas para evitar daños en el funcionamiento de estructuras, todas de responsabilidad de Vale. FEAM y el Ministerio Público oficiarán a la minera para que tome medidas de mitigación en cada una de estas presas”, informó el gobierno estatal en un comunicado.

Vale dijo a BNamericas en un correo electrónico que aún no había sido notificada por las autoridades estatales.

“Los equipos técnicos [de Vale] están realizando actualmente una detallada evaluación para llevar a cabo las mejoras necesarias en las estructuras, especialmente en sus accesos, que fueron afectados por las intensas lluvias de los últimos días en Minas Gerais. Para garantizar la seguridad de sus presas, la empresa vigila en tiempo real sus principales estructuras, las 24 horas del día y los 7 días de la semana, a través del Centro de Monitoreo Geotécnico (CMG)”, indicó la compañía.