Ministra: No se puede culpar al Gbno. por malas inversiones

Las empresas de energía no pueden culpar al Gobierno de Brasil por las pérdidas de capital de los últimos meses, afirmó la ministra de minas y energía del país, Dilma Rousseff, durante la conferencia de energía Fiesp que se realiza en Sao Paulo. Los inversionistas privados que adquirieron empresas en Brasil durante las privatizaciones de mediados de los noventa las compraron cuando el mercado alcanzaba su máxima actividad y las compañías registraban su mayor valor, dijo Rousseff. Además, los inversionistas realizaron sus pagos en momentos en que el real brasileño estaba en su punto más fuerte y valía poco más que el dólar estadounidense. Cuando el real se desplomó, comenzando la devaluación en 1999, éstas inversiones se vieron afectadas. "Quienes adquirieron activos privatizados en Brasil pagaron su valor en momentos en que éstos estaban en su nivel más alto, en el momento máximo de la burbuja y cuando el dólar registraba su valor más bajo", observó. "Cuando el real aumentó frente al dólar y el valor de los activos disminuyó, se registró una pérdida. El Gobierno no tiene ninguna responsabilidad por esa pérdida", dijo Rousseff. "No creo que cuando la burbuja explotó en EEUU alguien haya ido al presidente de la reserva nacional Alan Greenspan pidiendo compensación". "Así es el mercado: si compras mal, te castigan", continuó. "No hay forma de volver atrás". Sin embargo, el Gobierno está preparado para negociar deudas a corto plazo, junto con los esfuerzos de los bancos privados y accionistas, precisó. La ministra admitió que las distribuidoras han sufrido pérdidas como consecuencia de la caída en el consumo -lo que ya fue compensado- y manifestó que el banco brasileño de desarrollo BNDES discutiría estos temas caso por caso.