Ofensiva de renovables en Argentina plantea posibilidad de reanudarse subastas de suministro

Los miembros de la industria de energía renovable de Argentina dieron la bienvenida a un esquema liderado por el gobierno que puede resultar en la reanudación de las subastas de suministro de energía renovable.

La iniciativa, diseñada para impulsar la construcción de plantas de energía limpia y sistemas de almacenamiento que ayuden a sustituir la generación forzada a diésel en zonas aisladas, ha despertado el interés de los actores del sector.

Argentina detuvo su exitoso programa de subastas de suministro RenovAr hace algunos años, en medio de desafíos macroeconómicos y de financiamiento de proyectos, lo que agotó las velas de la industria.

Juan Manuel Alfonsín, director ejecutivo de la asociación argentina de energías renovables, Cader, dijo que el nuevo esquema era positivo.

Como parte del trabajo en etapa inicial, una convocatoria reciente por propuestas de proyectos atrajo más de 480 iniciativas, que implican tecnologías como energía solar y eólica, almacenamiento en baterías, biomasa, hidrógeno-gas natural y minihidroenergía.

Treinta y cuatro proyectos presentados son modulares, principalmente solares y eólicos, con una capacidad instalada superior a 100MW, para un total de 8,11GW

“Hay interés y un fuerte apetito por continuar con la generación de energía sustentable”, dijo Alfonsín. “Desde mi perspectiva, son buenas noticias”.

El administrador del mercado eléctrico mayorista Cammesa está analizando las propuestas. La siguiente fase consiste en presentar un informe, que cubra áreas como la viabilidad y la capacidad de transmisión, a la Secretaría de Energía, que luego explorará los posibles marcos regulatorios que podrían impulsarlos.

Alfonsín dijo que se podrían utilizar negociaciones directas entre el Estado y el propietario del proyecto, o un mecanismo de subasta, similar a RenovAr, para adjudicar los contratos de suministro.

“Me imagino que va a haber un ranking de las principales prioridades del país y, con base en eso, se tomarán las decisiones sobre qué proyectos se deben asignar”, dijo Alfonsín. “Seguirían las negociaciones con la parte que presentó el proyecto, o una subasta por el suministro; no está claro en este momento”.

En términos de generación forzada, los niveles tienden a aumentar en los meses de verano del país, diciembre y enero, cuando la demanda de electricidad suele alcanzar su punto máximo. La generación forzada se emplea principalmente en las regiones del nordeste, Buenos Aires y el noroeste.

En paralelo, el gobierno publicó recientemente un plan de transmisión regional. Respaldado por una línea de crédito de descarbonización del BID, el plan está diseñado para ayudar a acompañar la adición de capacidad de energías renovables que reemplazaría la generación a combustible líquido. El trabajo de red planificado, tanto greenfield como de expansión, es principalmente de 132kV, según información publicada en el Diario Oficial.

Se necesita un importante trabajo de expansión de la red en Argentina, particularmente entre el centro de demanda de la provincia de Buenos Aires y los centros de energías renovables en el noroeste y sureste.

En el frente general de financiación de proyectos, la situación se está suavizando ligeramente. El banco de desarrollo Bice tiene capacidad para aumentar el financiamiento para proyectos de energía limpia, mientras que las generadoras de energías limpias con proyectos en RenovAR ya están buscando formas de utilizar sus ingresos en pesos, como construir proyectos bajo el mercado a plazo Mater o plantas de autoabastecimiento para grandes consumidores.

Además, uno de los bancos comerciales más grandes del país, Santander, se asoció el año pasado con la empresa de soluciones energéticas Enel X para financiar instalaciones de generación distribuida para pymes.

PMGD

Cader también busca un cambio en las regulaciones en el segmento de generación distribuida.

Usando los respectivos regímenes distribuidos de PMGD de Chile y Brasil como modelo, los funcionarios quieren que el límite en los proyectos calificados aumente hasta 30MW, según lo adoptado por Brasil, desde los 2MW actuales.

El régimen de PMGD de Chile, que ofrece una serie de incentivos, ha resultado en una construcción a gran escala de proyectos conectados a la red de hasta 9MW.

“Estamos trabajando para avanzar en esto con las autoridades”, dijo Alfonsín. “Hemos comenzado a hacer reuniones, a emitir informes”.

Argentina tiene una meta, establecida por ley, de generar el 20% de la electricidad a partir de energías renovables para 2025. Las energías renovables cubrieron alrededor del 13% de la demanda el año pasado.

La expansión de las energías renovables del país se ha desacelerado desde la suspensión de RenovAr. La nueva capacidad que se está construyendo hoy corresponde en gran medida a proyectos de Mater y plantas de autoabastecimiento. Los grandes consumidores están interesados no solo en reducir la huella de carbono, sino también en reforzar la seguridad del suministro.