Oi activa 4G y moderniza telecomunicaciones en base antártica de Brasil

El operador de telecomunicaciones Oi, con sede en Río de Janeiro, activó una red 4G LTE y modernizó los sistemas de telecomunicaciones en la base antártica brasileña.

En una videoconferencia, el presidente Jair Bolsonaro inauguró los nuevos servicios de telecomunicaciones en la estación antártica Comandante Ferraz.

Al evento asistieron representantes de la Marina brasileña y Oi, quienes oficializaron un nuevo acuerdo de cooperación para expandir y modernizar los servicios de telecomunicaciones en la base antártica.

"Invertimos en materiales especiales y antenas que tienen un sistema anticongelante y son producidos por los mismos fabricantes de [equipos para] aviones, submarinos y vehículos militares. Nuestro equipo trabajó intensamente en el lugar para ofrecer una moderna red compatible con lo que entregamos en Brasil", dijo en un comunicado el presidente ejecutivo de Oi, Eurico Teles.

Las cifras de inversión no fueron reveladas.

Científicos y militares brasileños que trabajan en la estación tendrán ahora internet fija de alta velocidad para la transmisión de datos, videoconferencias y conexiones; red móvil con conexión 4G; acceso a wifi en todas las instalaciones de la base; y un sistema de recepción de señal televisiva, detalló Oi.

Con 20 veces más de capacidad de transmisión de datos, la red 4G ayudará a reducir el aislamiento de los científicos e investigadores y permitirá la transmisión de imágenes como observaciones atmosféricas, entre otras cosas.

En febrero de 2012, la estación brasileña quedó destruida por un incendio que provocó la muerte a dos oficiales navales y destruyó equipos multimillonarios.

Oi ha brindado servicios de telecomunicaciones a la base desde 2006, antes del incendio. En 2013 anunció que había restablecido parcialmente las comunicaciones en la estación. El acuerdo entre la Marina y Oi se renovó por cinco años más.

La estación, inaugurada en 1984, tenía —antes del incendio— una superficie total de 2.600m2 que albergaba dormitorios, laboratorios, oficinas, una guardería, una biblioteca, salas de comunicaciones, un gimnasio y un helipuerto.

La base aún no se ha reactivado por completo.

Al término de las obras, la nueva estación tendrá 4.500m2 y contará con 226 contenedores y 18 laboratorios, de los cuales 14 estarán dentro de la estación y el resto fuera del edificio principal.