Panorama del Caribe: cable submarino, disputa por torres, satélites y más

Nuevo cable submarino

Antigua y Barbuda está en proceso de invertir US$ 15 millones en un nuevo cable de conectividad submarino de propiedad estatal.

La infraestructura proporcionará acceso a internet de forma asequible y con un gran ancho de banda, según el primer ministro Gaston Browne.

El cable, diseñado por la empresa estatal de servicios públicos Apua, conectará Miami y Antigua.

Browne dijo que el proyecto está en marcha y debería estar listo en 18 meses, según medios locales.

Disputa por torre

Urco, regulador de las Islas Caimán, concluyó que Flow debe otorgar acceso a una torre en Caimán Brac a la firma Logic, luego de una investigación sobre una larga disputa por el uso compartido de infraestructura entre los dos proveedores de telecomunicaciones.

Las otras seis torres en disputa no pudieron soportar carga extra porque se superaron los umbrales de velocidad del viento.

La investigación también reveló preocupación por la integridad estructural de las torres de Flow, pues representan un riesgo tanto para la seguridad del personal como para los equipos de terceros, según un comunicado de Urco.

Flow debe informar sobre las medidas implementadas para garantizar que las torres que excedan los estándares de velocidad del viento no pongan en peligro la salud pública, la seguridad ni las operaciones de otras licencias.

Satélite

Bmobile, operador móvil de la compañía trinitense TSTT, se asoció con la empresa satelital Neptune Communications para mejorar la continuidad comercial y la recuperación ante desastres.

La firma utilizará la red satelital para agregar redundancia en caso de cortes de fibra u otros problemas con las redes terrestres.

Neptuno tiene una constelación de satélites en órbita terrestre baja que ofrece conectividad de banda ancha.

Brecha digital

La compañía satelital española Hispasat y la Unión de Telecomunicaciones del Caribe (CTU) firmaron un memorando de entendimiento para colaborar en la extensión de la conectividad satelital entre los Estados miembros de la Comunidad del Caribe (Caricom).

La colaboración se centrará en analizar casos de uso específicos para la capacidad satelital; abordar consideraciones legales, técnicas, presupuestarias y financieras; compartir experiencia en gobernanza de infraestructura espacial; estudiar la viabilidad de proyecto de infraestructura espacial compartida para asegurar la independencia y autonomía de las naciones del Caribe en el cierre de la brecha digital; e investigar nuevas oportunidades de negocio a través de startups o escisiones de Hispasat, entre otras actividades.