Perú y Bolivia pretenden reactivar proyecto de corredor bioceánico en 2019

Los gobiernos de Perú y Bolivia han desempolvado uno de los proyectos de infraestructura más ambiciosos de la región: acordaron comenzar a invertir en el ferrocarril bioceánico en 2019.

El presidente peruano, Martín Vizcarra, y su par boliviano, Evo Morales, quienes se reunieron en la conferencia de la Cumbre de las Américas en Lima, expresaron su intención de completar los estudios de preinversión este año. Las vecinas naciones andinas darán seguimiento al proyecto en una reunión binacional del gabinete en la ciudad boliviana de Cobija el 3T, según un comunicado.

El ferrocarril de 3.755km que atraviesa el continente y tiene un costo estimado de US$20.000mn está diseñado para unir el puerto brasileño de Santos en el Atlántico y Ilo en la costa del Pacífico de Perú vía Bolivia, además de enlaces con Argentina, Paraguay y Uruguay.

El presidente Vizcarra, que reemplazó a Pedro Pablo Kuczynski el mes pasado, se ha distanciado de su predecesor, quien dejó el proyecto a un lado en favor de iniciativas locales más inmediatas.

Morales, quien el año pasado anunció su intención de postularse para un cuarto mandato consecutivo, está buscando financiamiento europeo para financiar su intento de vincular al país sin salida al mar con los mercados de exportación. Bolivia es un importante productor de soja, gas natural y minerales.

Evo firmó en diciembre un memorando de entendimiento con el Gobierno suizo, mediante el cual un consorcio de 30 entidades lideradas por Swissrail y la austriaca Verband der Bahrindustrie acordaron invertir entre 10 y 15 millones de dólares en proyectos de diseño para el proyecto ferroviario.

Los dos presidentes también planean inaugurar un centro aduanero fronterizo binacional en la ciudad boliviana de Desaguadero, que tiene como objetivo acelerar el intercambio de visitantes y mercancías.

Morales, uno de los pocos líderes socialistas que queda en América Latina, criticó el cambio político hacia las economías de libre mercado en el continente, lo que subraya la importancia de la economía controlada por el Estado en Bolivia.

"La decadencia del modelo neoliberal lo único ha hecho es empobrecernos a costo de enriquecer unos pocos", declaró Morales en una reunión de unos 750 directores generales de 34 países en la Cumbre de Directores Ejecutivos del BID. "Si seguimos en esta desenfrenada carrera consumista, vamos a destruir el planeta", añadió.

Pese a que Morales se comprometió a invertir US$48.600mn en infraestructura y energía durante los próximos cinco años, su gobierno lucha por conseguir financiamiento, ya que el crecimiento económico se ha desacelerado. El gobierno, que asigna cerca de US$2.500mn/a a proyectos de infraestructura, planea destinar US$6.200mn al gasto público en 2018, según el Ministerio de Hacienda.