Políticas de AMLO preocupan a inversionistas de cara a 2020

Los mexicanos han enfrentado una serie de problemas y desafíos este año, pero el presidente Andrés Manuel López Obrador sigue siendo tan popular como siempre.

El país ha debido hacer frente a una economía estancada, amenazas e insultos del presidente Donald Trump, un aumento de la violencia y una serie de otros retos. La capacidad de la nación para superar estas dificultades llevó a AMLO a redoblar sus instintos izquierdistas al volver concentrar el sector energético en manos del Estado, mientras rehúye las métricas tradicionales de éxito de políticas como el crecimiento del PIB.

En el marco de la Mexico Summit 2019 organizada por The Economist en Ciudad de México, el presidente del centro local de estudios Cidac, Luis Rubio, dijo el martes que estas "señales contrarias" estaban complicando el horizonte de inversión en el país, opinión ampliamente compartida por los demás panelistas.

Las políticas están "desancladas" de las expectativas, dijo la senadora mexicana Vanessa Rubio.

Además, existen preocupaciones sobre la falta de visión integral.

Valeria Moy, directora general del centro de estudios México ¿Cómo vamos?, citó la refinería de Pemex en Dos Bocas y señaló que "hay proyectos, pero no hay una política energética".

MÉXICO: MENOS DEUDA QUE ARGENTINA Y TURQUÍA

Desde que asumió la presidencia en diciembre, AMLO ha obligado a las empresas privadas a renegociar los contratos con la eléctrica estatal CFE, canalizado miles de millones en efectivo a la atribulada petrolera estatal Pemex y cuestionado la legitimidad del PIB como métrica y de instituciones internacionales como el FMI.

El secretario de Hacienda, Arturo Herrera, dijo en el evento que lo que realmente importa es el crecimiento económico a largo plazo y que la austeridad en el gobierno de AMLO existe para crear espacio fiscal que le permita maniobrar en caso de desaceleración.

Cuando se le preguntó acerca de Pemex, Herrera citó una subasta de bonos de septiembre por US$7.500mn en nueva deuda de la compañía, fuertemente sobresuscrita, como prueba de la fe del mercado en el potencial de Pemex para un cambio tras 14 años de producción menguante. "Los inversionistas tienen confianza", sostuvo.

De acuerdo con Herrera, el hecho de evitar una elevada relación deuda a PIB permite explicar por qué México ha esquivado las rebajas de la calificación de crédito soberano y el aumento relacionado en los costos de endeudamiento con los que Argentina y Turquía han tenido que lidiar este año.

CUANDO LLEGUE LA CUENTA

Sin embargo, los inversionistas y los miembros de la comunidad de políticas públicas temen que las cosas puedan cambiar en 2020.

La senadora Rubio, que integró el Gabinete de la administración anterior, dijo que "el crecimiento económico es muy importante para la calificación crediticia". La economía de México viró hacia una recesión técnica en la mitad del año y se pronostica que el PIB crecerá 0,9% en 2019.

La negativa de Washington a aprobar el T-MEC, apodado "Newfta" en el evento The Economist, podría desencadenar tal reversión para México, dada su dependencia del comercio estadounidense.

El acuerdo comercial largamente pendiente ha perjudicado ya a México, según el analista Charles Seville, de Fitch Ratings, quien sostuvo que "el principal beneficio en este punto sería una reducción de la incertidumbre".

Otras fuentes de inestabilidad podrían comenzar también a afectar la confianza de los inversionistas globales, hasta ahora inmunes al riesgo. Los panelistas advirtieron que Argentina podría dirigirse hacia otro incumplimiento, que el brexit podría ser complicado y que la guerra comercial entre Estados Unidos y China podría intensificarse.

Asimismo, Moy, de México ¿Cómo vamos?, dijo que si bien parte de la retórica populista de AMLO le ha ayudado a desviar las malas noticias económicas de los últimos tiempos, puede que esto funcione solo por ahora. "El crecimiento es una variable neoliberal; lo que importa es el desarrollo", señaló, repitiendo líneas que AMLO ha utilizado en ocasiones en respuesta a datos económicos negativos. "Esa discusión, cambiando el discurso a diario para su beneficio, solo puede durar un tiempo".