Proyectos de construcción de El Salvador detenidos por problema hídrico

Una serie de proyectos de infraestructura de viviendas y comerciales se encuentran actualmente suspendidos en El Salvador como resultado del déficit de suministro de la planta de generación Las Pavas, de acuerdo con el medio local La Prensa Gráfica.

El periódico conversó con Ángel Díaz, presidente ejecutivo de la cámara salvadoreña de la construcción Casalco, quien afirmó que algunos proyectos de viviendas y comerciales en distintas partes de la capital, San Salvador, están a la espera de autorización de la empresa nacional de aguas, ANDA, para poder avanzar.

Según Díaz, las autoridades podrían emitir alrededor de 140 resoluciones este año para activar los servicios hídricos en algunos de los proyectos que están en desarrollo, y esto ayudaría a impulsar el sector de la construcción de El Salvador.

Díaz sostuvo que la ANDA se había abstenido de emitir las resoluciones dado que la planta Las Pavas no podía suministrar suficiente agua para garantizar el servicio a los nuevos proyectos. Según el representante de la cámara, en un momento del año pasado había US$500 millones en proyectos a la espera de la autorización de la ANDA.

De acuerdo con La Prensa Gráfica, el gobierno se dispone a aprobar financiamiento para mejorar las operaciones en la planta y reducir el déficit de suministro. En breve, el gobierno entregará más detalles de los fondos que se asignarán a la unidad.

Una vez emitidas las resoluciones podrían avanzar algunos de los proyectos que se ejecutan en el sector oeste de San Salvador, con inversiones de US$110mn, afirmó Casalco.

Según la regulación de construcción de El Salvador, los proyectos no pueden avanzar a menos que cuenten con las resoluciones técnicas de la ANDA durante sus primeras etapas de desarrollo. Estas resoluciones especifican la cantidad de agua y el tipo de servicio que se brindará al proyecto, además de otras especificaciones técnicas que deben cumplir las obras de construcción.

Las Pavas es la principal planta de agua potable de El Salvador y atiende a 65% de la población de la capital. El gobierno comenzó el año pasado a buscar créditos de distintas instituciones financieras para modernizar la instalación.