Telcos brasileñas rechazan prohibición de suspender servicios

Los operadores de telecomunicaciones brasileños están descontentos con la aparición de una serie de órdenes judiciales en diversos estados brasileños que prohíben suspender los servicios de clientes deudores debido a la crisis de COVID-19.

Los operadores afirman que no poder suspender los servicios en caso de falta de pago por parte de los consumidores generará más incumplimientos y socavará la sostenibilidad financiera del sector, particularmente en un momento de mayor gasto para garantizar la estabilidad de las redes de banda ancha.

Eduardo Tude, titular de la consultora de telecomunicaciones Teleco, está de acuerdo:

“Este es un momento en que los operadores están siendo presionados para garantizar la resistencia de las redes. Las reglas predeterminadas actuales ya son flexibles. No poder cortar los servicios es un incentivo para la falta de pago", afirmó Tude a BNamericas.

Al menos en cinco estados se han emitido decisiones judiciales que prohíben la suspensión de servicios, incluido São Paulo, y comenzaron a aparecer después de que el presidente Jair Bolsonaro describiera las telecomunicaciones como servicio "esencial" en un decreto.

Las telcos afirman que el mandato ha sido malinterpretado y su alcance no cubre aspectos financieros y normas relacionadas con el pago de servicios que ya están estipulados por el regulador Anatel.

Esta semana, SindiTelebrasil, que representa a los operadores Vivo, Claro, TIM, Oi y Algar, logró revocar un fallo similar emitido por un juez del estado de Rio Grande do Sul que evita los cortes en los servicios de telecomunicaciones.

Los operadores argumentan que han incrementado el ancho de banda para los clientes de internet fija y han proporcionado datos adicionales en los planes móviles, todo sin costo extra para los usuarios. Además, los plazos de pago de boletas vencidas ya se han extendido.

Las compañías también afirman que las aplicaciones de salud pública no consumen datos móviles y que se han abierto docenas de canales de televisión de pago a los clientes de forma gratuita.

PROVEEDORES DE SERVICIO DE INTERNET

La preocupación relacionada con la prohibición de los cortes de servicios la comparten actores grandes y pequeños.

La asociación de proveedores de servicios de internet, Abrint, que agrupa a miles de pequeños proveedores en todo Brasil, notificó al Consejo Nacional de Justicia (CNJ) y al Ministerio Público (MPF) sobre el tema.

"El objetivo es mostrar a estos organismos los riesgos para el segmento ISP de un posible cambio en las reglas de Anatel con respecto al tratamiento del incumplimiento", explicó Abrint en un comunicado.

La asociación afirma que las reglas actualmente vigentes ya son muy "favorables para el usuario", pues el cliente puede estar en incumplimiento por hasta 75 días antes de que se suspendan los servicios, lo que no tendría precedentes en el mundo.

Incluso si se aplica solo a operadores de mayor envergadura, la prohibición de la suspensión de servicios podría conducir a una migración de usuarios de compañías pequeñas a grandes, lo que generaría un gran desequilibrio en la dinámica competitiva, agregó Abrint.

LATINOAMÉRICA

Reglas similares que prohíben el corte de servicios también han aparecido en otros países de América Latina.

En Chile, una gran mayoría de legisladores aprobó un proyecto de ley que impide la suspensión de los servicios básicos mientras dure el estado de catástrofe que rige en el país.

Las empresas afectadas por la decisión incluyen aquellas que entregan servicios hídricos, de alcantarillado, eléctricos, de gas por tubería, telefónicos y de internet.

En Panamá, el presidente Laurentino Cohen aplicó una moratoria por tres meses (abril, mayo y junio) a los compromisos bancarios, de electricidad, agua potable, teléfono e internet.

"Pero, por favor, los que pueden pagar [los servicios], háganlo, porque eso es ser solidario", declaró el mandatario según medios locales.