Brasileña Softrack se expande a México con “AIoT” y apunta a potencial del nearshoring

La empresa brasileña de monitoreo de activos industriales e intralogística Softrack se expandirá a México con un enfoque en inteligencia artificial combinada con IoT (AIoT) y evaluará las oportunidades del nearshoring junto con industrias locales, dijo a BNamericas.

Fundada en 2013, Softrack asegura ser líder en Brasil en el nicho de soluciones de intralogística, es decir, monitoreo interno de activos industriales, como montacargas de horquillas, en combinación con sensores y software.

A nivel global, los principales competidores de Softrack son la firma estadounidense Powerfleet e InfoLink.

“En Brasil, cerca del 30% del mercado con alguna solución de telemetría utiliza tecnología de Softrack, pero se monitorea solo el 8% de las máquinas industriales. Es una gran oportunidad y refuerza la necesidad de invertir en esto”, señaló el CEO de la empresa, Menotti Franceschini, en una entrevista con BNamericas.

Las soluciones de Softrack atienden actualmente a 250 empresas, entre ellas MercadoLibre, Volvo, Carrefour, Boticário y Química Amparo, según Franceschini.

La relación de trabajo es tanto directa como indirecta, a través de empresas especializadas en arriendo de montacargas de horquillas y otros equipos industriales a grupos económicos.

EXPANSIÓN INTERNACIONAL

Si el potencial de crecimiento en Brasil es grande, las oportunidades en México son aún mayores, pues allí la presencia de soluciones inteligentes para intralogística es aún menor, afirmó Franceschini.

Al mismo tiempo, México ha atraído a cada vez más empresas manufactureras para atender tanto al mercado local como al estadounidense, de modo de prepararse para el nearshoring y la desglobalización, agregó.

Otro factor clave son los accidentes laborales, que en México son alrededor de 10 veces más frecuentes que en Brasil, según el ejecutivo.

El mercado mexicano es el primer paso en la estrategia de internacionalización de Softrack, que aspira a convertirse en “líder mundial” del sector.

“En esta hoja de ruta de internacionalización, queremos primero afianzar nuestro territorio, que es Latinoamérica. Brasil y México representan el 80% del PIB regional”, afirmó. “Además, el área logística y producción en México está creciendo mucho con el nearshoring y varias empresas están destinando sus activos allí”.

El ejecutivo no se muestra preocupado con un posible cambio en la política comercial de Estados Unidos para con México cuando Donald Trump asuma la presidencia el 20 de enero.

“No vemos grandes cambios en ese sentido. Tenemos confianza en el modelo. Además, tenemos por atender todo el mercado mexicano”.

CLIENTES, ENFOQUE Y FINANCIAMIENTO

La operación en México se está estructurando con un equipo local y la licencia para operar en el país se emitiría en los próximos meses.

Softrack está ahora capacitando a socios y distribuidores y ya tiene un primer cliente local, además de diferentes pruebas de concepto en marcha, según Franceschini.

Las principales áreas de enfoque son los grandes centros de distribución, el comercio electrónico y los sectores minorista e industrial, desde empresas medianas hasta grandes. El modelo de negocio de Softrack se basa en suscripciones, con una tarifa mensual que se cobra al cliente final por el uso de la tecnología.

Al igual que en Brasil, se está haciendo mucho hincapié en las alianzas con empresas que arriendan máquinas de manipulación interna para industrias. Franceschini estima que hay unas 500 empresas que arriendan este tipo de maquinaria industrial en Brasil y unas 250 en México.

Los equipos de Softrack seguirán produciéndose en Brasil para luego exportarse al mercado mexicano, con el objetivo de tener una planta en México dentro de dos a tres años.

En Brasil, este proceso lo llevan a cabo empresas asociadas o fabricantes de equipos originales (OEM). Franceschini no entregó más detalles sobre quiénes son los OEM, pero indicó que la empresa siempre opera con más de uno.

“Para cada componente contamos con dos o tres proveedores”, explicó. Algunos de los componentes vienen de China para ensamblaje en Brasil.

Para 2025, los planes incluyen una ronda de recaudación de fondos para reforzar la posición de capital de la empresa y potenciales fusiones y adquisiciones.