Diputados aprueban reglamento de reforma tributaria de Brasil

La Cámara de Diputados de Brasil aprobó el reglamento de la reforma tributaria de 2023 que apunta a simplificar el sistema.

La reforma sustituirá impuestos como el PIS, Cofins, IPI, ICMS e ISS por los gravámenes federales y estatales IBS y CBS, equivalentes al IVA en otros países.

"Además de lograr que el sistema sea mejor, más ágil, más simple y menos burocrático, nuestro objetivo ha sido lograr niveles más bajos de impuestos sobre una base mayor, con un porcentaje menor para todos los brasileños", dijo el presidente de la Cámara Baja, Arthur Lira, en un comunicado. 

Los diputados limitaron el IVA a 26,5% y cualquier gobierno que pretenda exceder el máximo debe enviar un proyecto de ley al Congreso.

“Implementamos un tope para que la tasa del IVA se mantenga siempre en un nivel estable y predecible para toda la población brasileña”, explicó Lira.

Ahora el Senado someterá el reglamento a votación. Se espera una implementación gradual del régimen tributario entre 2026 y 2033.

"Es posible que el Senado evalúe este reglamento en agosto. El riesgo que veo es que el Senado empeore la reforma tributaria, insertando más sectores económicos en modelos de exención y tributación, modificando demasiado el origen del proyecto de ley", dijo a BNamericas el analista Mário Sérgio Lima, de Medley Global Advisors.

Si bien la Cámara Baja autorizó el impuesto selectivo a actividades nocivas para la salud y el medioambiente, y al que se opusieron férreamente las empresas mineras, este se rebajó del 1% propuesto originalmente a 0,25% en respuesta a la presión de la industria.

Además, los diputados aprobaron aspectos populares, como beneficios fiscales para la carne y un mecanismo de devolución de impuestos para familias de bajos ingresos relacionados con las cuentas de servicios públicos.

MINERÍA

BNamericas conversa con Paulo Honório de Castro Júnior, presidente de la asociación de derecho tributario IMDT del estado de Minas Gerais y jefe de asuntos tributarios del despacho William Freire Advogados, sobre cómo las regulaciones afectan la minería.

BNamericas: ¿Qué le parece el texto aprobado?

Castro Júnior: Hubo avances en la versión aprobada, como la reducción de la tasa máxima del impuesto selectivo de 1% a 0,25%, pero también hubo reveses, en particular, la inclusión del carbón en el gravamen, sin claridad respecto del carbón importado.

El texto del [proyecto de ley complementario] PLP 68 no define la base del cálculo de las importaciones, lo que sugiere que no habrá impacto sobre el producto importado. El carbón es un insumo energético importante y las termoeléctricas despachan en un escenario de crisis para garantizar la seguridad energética del país. La energía brasileña se encarecerá con lo aprobado.

Además, el texto contiene varios aspectos inconstitucionales respecto del gravamen selectivo, que existía en la versión enviada por el gobierno. Incluye el mineral de hierro, sin evaluación alguna de su nocividad para el medioambiente; permite imponerlo a las exportaciones; ignora que la base de cálculo para la extracción debe ser el valor de la materia prima extraída; e incluye [la regalía minera] CFEM y [la tarifa de inspección estatal] TFRM en la base imponible.

Además del impuesto selectivo, me preocupa que el texto aprobado permita aplicar el IBS y el CBS sobre las inversiones mineras: la adquisición de derechos mineros en las subastas [del regulador] ANM y la cesión o arrendamiento de estos derechos entre particulares.

Los nuevos tributos obstaculizarán además el acceso a la propiedad minera, que también forma parte de la inversión. No tiene sentido que el texto presente reglas para inversiones donde el impuesto no se aplica, como en la compraventa de acciones corporativas, pero permite la tributación de otras formas de inversión. Habrá litigios por esto.

BNamericas: ¿Se cambiarán aspectos ligados a la minería en el Senado?

Castro Júnior: Eso espero. El Senado es una entidad más técnica, que se ocupa de la federación brasileña.

Cobrar un impuesto selectivo a los minerales, según el texto aprobado, no es más que establecer tasas adicionales del CFEM en perjuicio de estados y municipios, es decir, en violación del pacto federativo.

Esto se debe a que el Gobierno Federal recibirá el 50% de este tributo, mientras que ahora solo recibe el 10% del CFEM. Si la idea era aumentar las regalías, esto debería hacerse claramente, sin el artificio de crear un nuevo impuesto solo para atraer más ingresos a las arcas fiscales.

BNamericas: ¿Podría aplicarse el impuesto de 0,25% a todos los minerales o solo será para el mineral de hierro, como se había especulado?

Castro Júnior: El texto aprobado establece que el tope de 0,25% se aplica a las operaciones con bienes minerales extraídos, sin precisar cuáles.

Como el mineral de hierro y el carbón se incluyeron en la hipótesis fiscal y ambos son bienes minerales extraídos, es correcto que el límite del tipo impositivo se aplique a ambos productos, no solo al mineral de hierro.