Las inversiones en el sector de agua potable y alcantarillado de Brasil

Las inversiones en el sector de agua potable y alcantarillado de Brasil han cobrado un fuerte impulso en los últimos años gracias a cambios regulatorios y una mejor estructuración de proyectos, y se espera que esta tendencia se acelere en los próximos años.

En 2023, las inversiones en este tipo de proyectos sumaron casi 29.000 millones de reales (US$ 5.000 millones), frente a los 13.600 millones de reales de 2020, según datos del sistema de información sobre saneamiento básico Sinisa, administrado por el Ministerio de las Ciudades.

"Es una cifra que representa un avance significativo y que refleja la mayor competencia y la mayor participación del sector privado entre las concesionarias que prestan servicios de agua potable y alcantarillado a la población de todo el país", dijo Christianne Dias, presidenta de la asociación de concesionarias de agua potable y alcantarillado, Abcon, en conversación con BNamericas.

La inversión de 2023 batió un récord, y la comparación con 2020 es especialmente relevante, ya que ese año marcó un punto de inflexión para el sector.

A mediados de 2020, Brasil aprobó nuevas regulaciones que exigen a los municipios invertir en proyectos de agua potable y alcantarillado para garantizar una cobertura universal en 2033. En ese momento, cerca de la mitad de los brasileños carecía de acceso adecuado a redes de aguas.

Las reformas abrieron el sector a la inversión privada a través de contratos de concesión, asociaciones público-privadas (APP) y privatizaciones, rompiendo el dominio de las empresas estatales.

Los proyectos hídricos requirieron inversiones por 18.000 millones de reales en 2023. Más de la mitad de ese monto se destinó a la distribución de agua, mientras que 3.900 millones se asignaron a captación o tratamiento de agua.

El sector de alcantarillado recibió 10.900 millones de reales, de los cuales 4.900 millones de reales se reservaron a tratamiento y 4.000 millones, a recolección y transporte, según datos de Sinisa.

"Una de las novedades de Sinisa es la separación entre agua potable y alcantarillado, pues antes los datos se recopilaban en conjunto. Esto nos permite una mayor precisión y detalle en la información. Brasil ha avanzado en la universalización del saneamiento básico. Estos datos nos guiarán para tomar las mejores decisiones. El Ministerio de las Ciudades ha trabajado arduamente para mejorar de manera sostenida la calidad de la información sobre saneamiento, y Sinisa es parte fundamental de este esfuerzo", señaló Leonardo Picciani, secretario de Saneamiento del ministerio, en un comunicado.

La participación privada en el saneamiento se ha expandido de forma significativa y ahora cubre a cerca del 30 % de los municipios, en comparación con tan solo el 5 % en 2020, cuando se introdujo el nuevo marco legal. Abcon prevé que la presencia de los privados seguirá creciendo en los próximos años.

En 2024 se consiguieron 92.400 millones de reales en inversiones futuras mediante 17 subastas de contratos regionales y municipales. Para 2025, Abcon estima que se realizarán al menos 25 licitaciones en beneficio de 848 municipios y con inversiones adicionales por unos 69.300 millones de reales.

Abcon destacó que la mayor parte de los 900.000 millones de reales necesarios para alcanzar las metas de cobertura universal para 2033 se invertirán en los próximos años.

Más allá de las reformas, el avance en proyectos de agua potable y alcantarillado también ha recibido el apoyo del banco de desarrollo BNDES ayudando a los gobiernos locales a estructurar contratos de concesión y APP para la inversión privada.

Los datos de Sinisa muestran que, a finales de 2023, el 83,1 % de la población de Brasil tenía acceso a redes de suministro de agua potable, mientras que el 59,7 % estaba conectada a sistemas de alcantarillado.