Radiografía a la cartera de concesiones y APP de saneamiento de Brasil

Brasil comenzó 2024 con 49 proyectos de saneamiento en fase de estructuración, algunos de los cuales podrían ofrecerse al sector privado durante el año.

Las inversiones en estas concesiones y asociaciones público-privadas (APP) rondan los 100.000 millones de reales (US$20.400 millones), según cifras compiladas para BNamericas por la asociación de concesionarias de agua potable y alcantarillado, Abcon.

“Esperamos un 2024 muy prometedor, con 49 proyectos en fase de estructuración, 38 de ellos municipales y 11 regionales, que en total prevén más de 100.000 millones de reales en inversiones en asociación con el sector privado. Se trata de un segmento con una cartera de proyectos muy sólida”, dijo a BNamericas el director ejecutivo de Abcon, Percy Soares Neto.

Las iniciativas cubren a más de 62 millones de personas en todo el país.

Los proyectos regionales involucran consorcios formados por municipios para hacer los contratos más atractivos.

No todos los proyectos en carpeta se ofrecerán al sector privado este año, pero los más grandes debieran ver la luz en 2024, señaló Soares, y agregó que se encuentran en los estados de Sergipe y Pará.

El banco de desarrollo BNDES está estructurando el contrato de concesión en Sergipe y se espera que incluya servicios en 75 localidades para 2,3 millones de personas.

La subasta de este contrato está prevista para el segundo trimestre y requerirá inversiones de 6.200 millones de reales.

BNDES también está apoyando a las autoridades de Pará en la estructuración de un contrato de concesión, pero aún no se han revelado detalles.

El sector de agua y residuos de Brasil ha visto una serie de proyectos desde mediados de 2020, cuando un cambio regulatorio clave facilitó la entrada de empresas privadas a una industria dominada durante mucho tiempo por empresas estatales.

El país ha registrado 37 subastas desde que entró en vigor la nueva regulación, con la oferta de nueve contratos regionales y 28 contratos municipales por un total de 101.000 millones de reales en inversiones.

El reglamento exige que los gobiernos locales garanticen el suministro de servicios de agua y alcantarillado para toda la población de aquí a 2033. En caso de no cumplir el objetivo, las autoridades locales podrían verse privadas de financiación federal.

La administración del presidente Luiz Inácio Lula da Silva asumió el cargo en enero de 2023, lo que provocó una desaceleración temporal en el ritmo de las subastas sectoriales mientras buscaba realizar cambios regulatorios para favorecer las APP sobre las concesiones.

Como los cambios reales no fueron drásticos, la percepción del riesgo entre los inversores privados mejoró a finales de año.

"2023 fue un año interesante para el saneamiento brasileño. Comenzó con un período de incertidumbre debido a la discusión de dos decretos publicados por el Gobierno Federal y terminó con avances que trajeron calma", manifestó Soares.

Los inversionistas ahora están enfocados en el tema de los impuestos sectoriales, que se están discutiendo como parte de la amplia reforma tributaria aprobada por el Congreso a fines del año pasado, agregó.