Reporte de Banca en México

El sector financiero de México continuó mostrando un crecimiento saludable durante el 1T19, aunque han surgido signos de debilitamiento de la demanda crediticia en un sector afectado por problemas nacionales e internacionales, que generan incertidumbre en los inversores.

Si bien el presidente Andrés Manuel López Obrador continúa gozando de sólidos índices de aprobación y la confianza de los consumidores se encontraba alta a principios de año, los mercados se han visto afectados por una serie de traspiés de la nueva administración, así como las crecientes preocupaciones de las agencias de calificación.

Fitch Ratings colocó las calificaciones soberanas en vigilancia Negativa en octubre, y S&P hizo lo propio a principios de marzo, llevando también a varios bancos a perspectiva Negativa. Si bien Moody's sigue teniendo para el soberano perspectiva Estable, su última actualización fue en abril de 2018 y podría cambiar pronto.

El Banco Central mexicano parece ahora dispuesto a reducir la tasa de interés de referencia por primera vez desde 2014, luego de una serie de alzas entre diciembre de 2015 y enero de este año que aumentaron la tasa en 525 puntos básicos a 8,25%, la más alta en más de una década.

En un análisis publicado el 30 de abril, Fitch indicó que espera que el Banco Central baje su tasa en 100 puntos básicos acumulativamente para fines de 2020.

"Sin embargo, puede que las tasas más bajas no generen una demanda de crédito bancario sustancialmente mayor mientras la economía se mantenga estancada y el gasto de los consumidores sea débil", señaló la agencia.

Además del mayor costo del crédito en el mercado nacional, factores externos que han ayudado a extraer capital de los mercados emergentes. Entre estos se incluyen la normalización de la política monetaria de EE.UU., las negociaciones comerciales entre EE.UU. y México, el brexit y la guerra comercial entre EE.UU. y China.

NO TODO ES MALO

A pesar de la cancelación por parte de AMLO de un importante proyecto aeroportuario y el manejo poco adecuado de una propuesta para eliminar las comisiones bancarias, el presidente y los bancos de la nación han hecho esfuerzos para al menos parecer estar en sincronía, y los bancos apoyan en gran medida una serie de iniciativas propuestas por AMLO en enero para impulsar la inclusión financiera.

Además, un nuevo sistema de pagos basado en códigos QR, denominado CoDi, está listo para su implementación completa en septiembre. La plataforma, desarrollada en el Banco Central, ha ganado también amplio apoyo de la administración y del sector privado por su potencial para cambiar las reglas del juego de los pagos electrónicos en el país.

PANORAMA SECTORIAL

Según cifras del regulador del sector financiero CNBV, los activos de todo el sistema alcanzaban 9,47bn de pesos (US$501.000mn) al cierre de marzo, con un modesto crecimiento interanual de 1% frente al 4,8% observado en igual fecha un año atrás, y muy lejos del 12,0% anotado en marzo de 2017.

Sin embargo, los créditos continúan aferrándose a un crecimiento de dos dígitos, ya que los préstamos de todo el sistema a fines de marzo se ubicaban en 5,25bn de pesos, 10,1% más año con año, comparado con el 9,6% reportado en marzo de 2018 y el 12,0% registrado dos años antes.

No obstante, los banqueros señalan que los buenos resultados podrían comenzar a ceder. El director general de Citibanamex, Ernest Torres, dijo en la última conferencia telefónica de resultados del grupo que su banco solo experimentó un crecimiento interanual de 1% en el 1T19, mientras cree que el sector en general verá una expansión de entre 5% y 10% este año.

Fitch pronostica un crecimiento crediticio para 2019 en el rango de 6-8% y recalcó que, históricamente, los ingresos netos por intereses de los bancos mexicanos han disminuido cuando el Banco Central ha recortado la tasa de referencia.

La siguiente tabla detalla la evolución de los activos, préstamos y ganancias en los bancos más grandes de México hasta marzo, basándose en los datos más recientes de CNBV.

MANIOBRAS CORPORATIVAS

La firma de investigación Transactional Track Record informó una caída interanual de 40% en el número de operaciones de fusiones y adquisiciones que tuvieron lugar en el 1T19, lo que refleja el entorno actual de preocupación de los inversores que muchos han vinculado a la nueva administración.

El último acuerdo importante alcanzado en el sector financiero fue la adquisición por parte del banco mexicano Banorte del connacional Grupo Interacciones en un acuerdo 50:50 en efectivo y acciones por cerca de US$690mn, que se cerró en julio de 2018.

El gigante bancario español Santander señaló el mes pasado que ofrecería 2.560mn de euros (US$2.890mn) para recomprar la mayor cantidad posible del 25% que poseen los accionistas minoritarios en Santander México.

EMERGENTE POLO FINTECH

A los 51 bancos de México se les une también una floreciente industria fintech, que está mostrando una creciente madurez, respaldada por la introducción de un marco regulatorio integral el año pasado.

De acuerdo con la asociación latinoamericana de tecnofinanzas Finnovista, 125 fintechs ingresaron al sector financiero mexicano en 2018, lo que elevó el total a 334 empresas, superadas solo por Brasil en la región.

El ecosistema mexicano era a fines del año pasado 2,5 veces más grande que el de Colombia, el tercer mayor ecosistema fintech de la región con 124 startups, más de 3 veces más que el de Argentina y 4 veces más que el de Chile.

La tasa de mortalidad fintech de México llegó a 12% en 2018 frente al 14% de Brasil y, según Finnovista, la menor tasa de mortalidad mexicana combinada con cierta desaceleración de los nuevos participantes sugiere que el ecosistema podría estar entrando en una fase de consolidación.

México se ha convertido también en líder en regulación fintech, después de la aprobación de la legislación pionera en marzo de 2018 y la legislación secundaria en septiembre del mismo año.

En parte debido a los requisitos de esa legislación, el Banco Central se ha convertido además en una de las voces más fuertes de la región en cuanto a criptomonedas, publicando una importante actualización en marzo que buscaba mantener el uso de activos virtuales "al alcance de la mano", con preocupaciones sobre la falta de comprensión del público con los activos altamente volátiles y su potencial de uso indebido con el lavado de dinero.

El Banco Central está llevando a cabo consultas públicas sobre criptomonedas, nuevos modelos fintech y crowdfunding, las que terminarán el 5 de junio.

La certeza que aporta la regulación podría ayudar a atraer capital para las fintechs más consolidadas de México, con historias de éxito locales que buscan ampliar o expandirse, tal vez con jugadores más fuertes como la plataforma de servicios financieros Kubo Financial, el operador criptográfico Bitso y el financista de microempresas Konfio.

Las fintechs locales deben lidiar también con la afluencia de firmas del resto de América Latina, entre ellas el brasileño Nubank, que el martes anunció su ingreso a México, el servicio de entrega Rappi de Argentina y el actor colombiano de pagos TPaga, que ha hecho grandes esfuerzos para aumentar su capacidad a raíz de CoDi.

Si los pagos basados en QR se intensifican en gran medida gracias a CoDi, ello podría forzar a las fintechs a girar rápidamente, incluida una de las más exitosas del país, Clip, que ya ha logrado avances al atraer a las pymes con un lector minitarjeta de bajo costo que se adhiere a los teléfonos inteligentes para aceptar pagos.

Al igual que en muchos otros países del mundo, los bancos y las fintechs en México enfrentan la amenaza potencial de una disrupción masiva por parte de bigtechs como Apple y Amazon.

Sin embargo, los bajos niveles de inclusión financiera de México deberían ofrecer un atractivo potencial de crecimiento para todos los tipos de jugadores.